Olas de calor: expertos advierten sobre riesgos para la salud y el aumento de incendios forestales

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Enero de 2025 se convirtió en el más cálido jamás medido en la Tierra; algo similar ocurrió en Santiago de Chile, donde cerró como el segundo enero más caluroso (tras el de 2017) con sobre 32º promedio.

Ante la llegada de una nueva ola de calor a la zona central, expertos llaman a resguardar la salud de las personas y a prevenir la ocurrencia de incendios forestales.

Pese a la instalación durante enero del fenómeno de La Niña -el que normalmente tiene un efecto de enfriamiento de las temperaturas globales-, según el observatorio europeo Copernicus, el pasado mes fue el enero más cálido medido hasta ahora en el mundo, con una temperatura del aire en superficie de 13,23 ºC, lo que implica 1,75 ºC por encima de los niveles preindustriales, siguiendo así el triste récord establecido durante 2024 que lo posicionó como el año más cálido desde que se tienen registros, y el décimo año consecutivo en lograr esta condición.

Estas altas temperaturas se han hecho evidentes también en Chile. “El mes de enero fue el segundo más cálido en la historia de Santiago, superado solamente por el enero excepcional del año 2017, donde el promedio de las temperaturas fue de 33,3 ºC (el año de los mega incendios forestales donde se quemaron 500 mil hectáreas en el centro sur de Chile). Este año, en enero la temperatura promedió 32,1ºC, en Santiago”, destaca Alejandro Sepúlveda, periodista científico, editor y especialista en el ámbito meteorológico.

“El comienzo de 2025 no es en lo absoluto esperanzador en lo que debiese ser uno de los principales desafíos para la humanidad en 2025: detener este camino de constantes alzas de temperaturas y lograr, finalmente, cumplir con la meta de que se mantengan muy por debajo de 2 °C respecto a los niveles preindustriales y proseguir con los esfuerzos para limitarlo a 1,5 °C”, declara al respecto Silvana Espinosa, geógrafa y vocera de Greenpeace.

Pese a este anhelo compartido, Sepúlveda, proyecta que “el pronóstico para este verano en Chile nos indica que, en promedio, debiésemos esperar temperaturas máximas por sobre la media histórica en todo el territorio nacional”.

En lo más inmediato, el experto en meteorología alerta que para este fin de semana se esperan temperaturas altas en la zona central del país, que podrían convertirse en récords: “Se viene un golpe de calor intenso este sábado, donde incluso se podría llegar a marcar 40 ºC a la sombra”, comenta y añade que es posible que, de concretarse ese panorama, se podría batir la marca máxima de calor para el mes de febrero: 36,5 ºC, registrados en 1914, y no descarta que, incluso, se pueda superar la marca absoluta de calor en Santiago, que data de enero de 2019 cuando los termómetros marcaron 38,3º en la capital.

En este escenario, Espinosa destaca que, en este escenario, “es urgente que seamos conscientes del riesgo que el calor reviste para las poblaciones de riesgo (niños y niñas, mujeres embarazadas, enfermos crónicos y adultos mayores) y en nuestros territorios, y nos preparemos para enfrentarlo de mejor manera”. 

Llamados a la prevención y precaución

Al referirse al pronóstico meteorológico de este fin de semana, el ministro de Agricultura. Esteban Valenzuela, aseguró que “estamos con una alerta importante” ya que este fin de semana la zona central del país se enfrentará a “un triángulo de lo peor”, que considera altas temperaturas (entre 35º y 40º), vientos de hasta 40 Km/h y la presencia de viento cálido proveniente desde el Este (llamado “puelche” o “raco”).

Frente a esto, la geógrafa de Greenpeace recuerda que también se debe tener especial atención a la posibilidad de ocurrencia de incendios forestales, los que han aumentado en los últimos años producto de la variabilidad de las condiciones meteorológicas y climáticas junto a épocas de prolongadas sequías, y también por factores humanos (intencionales o involuntarios) que terminan desatando feroces siniestros, algo que se puede evidenciar en, por ejemplo, la Región Metropolitana, donde se presenta el mayor porcentaje de variación del país en cuanto a número de incendios (+52%) al comparar el último período con el actual.

“La falta de una planificación territorial adecuada, sobre todo para la interfaz urbano-rural; la expansión de asentamientos humanos y la consecuente degradación de los ecosistemas han provocado que los incendios forestales sean cada vez más extensos o más dañinos, por lo que la ocurrencia de estos se ha convertido en una de las principales preocupaciones cada verano”, comenta Espinosa.

Sepúlveda coincide con aquello y agrega que “debido al invierno lluvioso que tuvimos, hay más combustible vegetal disponible para la propagación de los incendios”, lo que sumado a la posibilidad de vientos (incluso, una brisa) nos interpela a mantener un mayor grado de alerta, “sobre todo considerando que hoy en Chile la distribución poblacional ha provocado una proliferación de viviendas en sectores rurales”, expresa.

Teniendo en cuenta lo anterior, los expertos concuerdan que es importante reducir los riesgos en verano, donde Sepúlveda destaca la importancia de la educación: “Es importante dar a conocer a las personas que el calor extremo mata, que hay que proteger no sólo la piel y los ojos de la radiación UV, sino que también es clave la hidratación”. En la misma línea, el periodista añade que es fundamental promover la creación de más áreas verdes en los centros urbanos, “para que la sensación térmica no sea tan desigual en, por ejemplo, Providencia y Pedro Aguirre Cerda”.

Por su parte, la vocera de Greenpeace recuerda lo relevante que es contar con una regulación que sea capaz de prevenir la ocurrencia de incendios, y a la vez organizar sus combates una vez que estos han sido declarados. “Es crucial contar con una ley que proteja de manera efectiva las zonas de interfaz urbano-rural, así como la incorporación de áreas de amortiguación que eviten la rápida propagación de incendios y/o permitan que estos sean controlados. Es por esto que esperamos que el Senado, particularmente su Comisión de Agricultura, avance con mayor celeridad en la discusión del proyecto de ley presentado por el Ejecutivo que se hace cargo de algunas de estas urgencias”, concluye Espinosa.

ECOLÓGICA

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