Medida N°14: por una economía creciente y adaptada al cambio climático

ENEL
Diario Sustentable
Diario Sustentablehttps://www.diariosustentable.com/
Contamos historias que merecen crecer. Pensamos diferente y elegimos creer en las personas, comunidades y organizaciones, las grandes y las que están empezando ahora en la mesa de un café, pero que van a cambiar el mundo.
ENEL
NESTLÉ
++BETTER
PEFC

Por Daniel Vercelli Baladrón, socio y Managing Partner de la consultora Manuia, director de empresas.

Icare. Récord de temperatura de la atmósfera. Crecimiento económico. Olas de calor. Agricultura. ¿Qué tienen en común, además de ser palabras y conceptos que acapararon titulares la semana pasada? Vamos por partes.

Comencemos por Icare y el crecimiento. Hace algunos días, dicha organización realizó el primer evento del año, denominado “2025: un pacto por el crecimiento”, un encuentro donde diversas autoridades y expertos compartieron estrategias para potenciar la economía del país. La invitación se centró en retomar la senda de crecimiento anual de 5%, y para ello, un grupo transversal de economistas presentó el documento “13 verdades incómodas para una agenda de reformas radicales”, con propuestas de transformación en materia institucional, económica, social y laboral.

Se trata de 13 medidas que buscan recuperar el ritmo de desarrollo económico que tendrían gran valor, efectividad y que están en la dirección correcta, siendo un aporte real y concreto de Icare y del grupo de economistas que las proponen, quienes sólo debe felicitarse y agradecerse. En el ánimo de aportar un ingrediente más a la conversación pública, creo que necesitamos pensar también en una “medida 14”, en la que se aborde el desafío de alcanzar ese crecimiento tan deseable y esquivo de manera sustentable para que sea proyectable por muchas décadas. Si no internalizamos la idea de crecer de manera sostenible y adaptarnos a, por ejemplo, una nueva realidad climática, los esfuerzos pueden incluso rendirnos menos en el mediano y largo plazo.

Vamos ahora al récord de temperatura. Según el programa Copérnico de la Unión Europea, una red de satélites climáticos que registran la temperatura en todo el planeta, en 2024 se registraron 15,1 grados de temperatura promedio en el mundo, superando en 0,12 grados el récord de 2023, y superando también el límite de aumento de la temperatura planetaria de 1,5 grados sobre el promedio de la era pre-industrial que la humanidad había acordado no traspasar bajo el Acuerdo de París. En paralelo, la NASA asegura que en 2024, la Tierra estuvo 1,28 grados más caliente que la media del último siglo, otro récord absoluto.

Ahora abordemos la agricultura y el crecimiento. En Chile, durante el primer mes del verano ya se han producido olas de calor en distintas regiones que no sólo afectan el bienestar de las personas, sino que además impactan distintas actividades productivas, como por ejemplo, la suspensión de faenas agrícolas. De hecho la semana pasada desde la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), se planteó la conveniencia de suspender esas faenas durante la ola de calor en los horarios de mayor temperatura.

Si queremos promover el crecimiento económico, sabiendo lo esquivo que éste ha sido y que toda décima de crecimiento importa, una medida 14 que incorpore lógicas de mitigación y adaptación a la crisis climática (entre otros aspectos del desarrollo sostenible) sería fundamental para enfrentar mejor el desafío que nos plantea en este caso el calentamiento global y sus impactos en la agricultura. Incluso el rubro de la construcción puede verse afectado ante eventuales paralizaciones de obras y qué decir de las faenas mineras, donde una buena parte requiere de personas expuestas al aire libre durante varias horas al día. Recordemos que en los últimos años se ha triplicado la cantidad de días con olas de calor en la zona centro del país, algo que lamentablemente sólo irá en aumento.

El mundo ya entró en una fase de aumento de 1,5 grados y lo más probable es que las olas de calor crezcan en intensidad y en consecuencias negativas. En invierno puede ocurrir algo similar con las sequías o los fenómenos climáticos extremos. Cada vez más seguido, veremos impactos en la productividad que chocan con las aspiraciones de crecimiento económico, por lo que si queremos lograr ese anhelado 5%, desde el mundo empresarial no podemos pasar por alto la crisis climática ni sus implicancias. Por el bien de las personas y el ecosistema, cualquier plan estratégico debe incluir objetivos económicos, medioambientales y sociales para garantizar que el desarrollo sea duradero y efectivo. Sólo así habrá posibilidades reales de sostener las tasas de crecimiento que anhelamos y necesitamos.

ECOLÓGICA

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here

NUESTROS SOCIOS

LO ÚLTIMO

×