En el primer episodio del podcast “Líderes que Inspiran“, en colaboración con Chapter Zero, tuvimos el privilegio de conversar con Mario Velázquez, presidente del Clúster Andino Sur de Schneider Electric.
Velázquez dejó claro que la acción climática y el liderazgo deben ir de la mano, no solo desde la dirección de grandes corporaciones, sino también desde un compromiso personal profundo. Desde su experiencia en distintos mercados de América Latina, compartió reflexiones clave sobre cómo la coherencia personal, la resiliencia y la inspiración pueden ser factores determinantes en la lucha contra el cambio climático.
Liderazgo con coherencia: el cambio empieza en casa
Para Mario Velázquez, el rol del liderazgo efectivo comienza desde la coherencia personal. En sus palabras, “debemos ser role models en cuanto al compromiso frente al cambio climático“. Esta coherencia no se limita solo a lo que se hace en la empresa, sino también a cómo vivimos nuestras vidas fuera del trabajo. Velázquez sostiene que el cambio no depende únicamente de las políticas empresariales, sino de las acciones individuales.
“El cambio está aquí, pero no es esperar que cambie una empresa, es ver qué estoy cambiando yo desde mi casa”.
Este enfoque personal-responsable define el liderazgo que Velázquez ejerce en Schneider Electric, donde se asegura de que su propio comportamiento sea coherente con los valores que promueve en la organización. Este ejemplo, según él, inspira y moviliza a otros en la empresa, lo que fortalece una cultura organizacional alineada con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), en particular el ODS 9, que aboga por la innovación y la infraestructura sostenibles.
El rol de los directores: inspirar y movilizar hacia la acción climática
Uno de los aspectos más importantes que Mario Velázquez subrayó es el papel crucial que juegan los directores en las empresas para inspirar acciones concretas contra el cambio climático. Velázquez, quien es parte de la iniciativa Chapter Zero, mencionó que el liderazgo desde los directorios debe basarse en la inspiración y no solo en la gestión. “No puedo inspirarme en alguien que no es coherente”, afirmó con firmeza. Este compromiso de los líderes, especialmente en temas de sustentabilidad, es lo que motiva a los equipos a cambiar conductas y adoptar prácticas más responsables.
Además, destacó la necesidad de que los directores estén cerca de la realidad de sus empresas y sectores, mencionando que el gobierno corporativo debe ser maduro y formal, adaptándose a las demandas de los accionistas y la sociedad en general. Velázquez resaltó cómo en América Latina, y específicamente en Chile, se ha dado un avance significativo en la madurez del gobierno corporativo, con regulaciones más estrictas y un mayor enfoque en la sostenibilidad.
La resiliencia como herramienta clave
En su intervención, Mario Velázquez también hizo una interesante comparación entre su hobby, el golf, y el mundo empresarial. En ambos, la resiliencia es fundamental. Explicó que el golf le ha enseñado la importancia de manejar la frustración y de adaptarse constantemente a los desafíos, lecciones que aplica en su vida profesional. “Uno planifica, pero las cosas no siempre salen como uno quiere”, reflexionó. Esta capacidad de replantear estrategias rápidamente es clave tanto en el deporte como en los negocios, especialmente en tiempos de crisis climática.
“Si uno se queda con el impacto de haber fallado, es probable que el siguiente golpe sea peor”.
Mentores y el valor de compartir el conocimiento
Otro tema abordado es el papel de las mentorías en la formación de líderes. Velázquez valoró la importancia de tener mentores que sirvan de guía en momentos decisivos de la carrera. Para él, estos espacios de aprendizaje mutuo son esenciales, y mencionó que uno de sus compromisos más importantes es devolver lo que ha aprendido a través de la mentoría a jóvenes profesionales. “Yo he tenido la oportunidad de acercarme a muchas personas que admiro en Chile, y ellas siempre han estado dispuestas a abrirme las puertas”, destacó, subrayando el valor de construir una red de apoyo profesional.
Esta filosofía de “pedir y luego devolver” no solo es un motor de crecimiento personal, sino que también contribuye a fortalecer la cultura organizacional, generando ciclos virtuosos donde el conocimiento se comparte y se multiplica.
El legado del liderazgo sostenible
En última instancia, el liderazgo efectivo no se trata únicamente de alcanzar metas empresariales, sino de dejar un legado de impacto positivo. El cambio climático es uno de los desafíos más urgentes de nuestro tiempo, y los líderes de hoy tienen la responsabilidad de abordar este tema con convicción y coherencia. “Tenemos que ser coherentes en todos los ámbitos de nuestra vida, porque si no lo somos, no podemos inspirar a otros“, afirmó.
Velázquez concluyó resaltando que el futuro del liderazgo empresarial está en la capacidad de ser agentes de cambio, no solo dentro de las empresas, sino también en las comunidades donde estas operan. “Todos somos agentes de cambio”, recalcó, y solo a través de este compromiso colectivo podremos enfrentar los desafíos que el cambio climático presenta para las futuras generaciones.
