Por Allan Picoli, Gerente de Dispersiones, Resinas y Aditivos BASF Chile.
El cambio climático llegó para quedarse y nuestro país es -y será- uno de los más afectados. Las olas de calor peligrosamente cercanas a los 40 grados y la magnitud de los incendios nos lo recuerdan inevitablemente.
Se trata de un fenómeno mundial que ya no se cuestiona. Las Naciones Unidas celebró su 28° Conferencia sobre el Cambio Climático (COP), donde 198 países firmaron el Acuerdo de Dubai que, entre otros, fija las metas de triplicar las energías renovables, duplicar la tasa de mejora de la eficiencia energética al 2030 y alcanzar emisiones netas de carbono cero para 2050.
La sustentabilidad es uno de los mayores desafíos del siglo XXI y requiere de acciones de todos los ámbitos de la sociedad y la economía. Un reto que ciertamente incluye al sector de los envases, quizás la esfera que nos toca más personalmente en nuestro cotidiano.
Por esto es que, a nivel local, la implementación de la ley REP (de Responsabilidad Extendida del Productor) comenzó justamente con envases y embalajes, entregando al productor la responsabilidad de la gestión de los residuos, con el fin de avanzar en la economía circular.
Y es que los envases juegan un rol esencial en nuestras vidas, protegiendo y conservando los productos, facilitando el transporte y la distribución y sirviendo como una eficaz herramienta de marketing. Aunque lamentablemente, su producción y eliminación inadecuada ha tenido importantes consecuencias para el medio ambiente.
Pese a que generan un alto volumen de residuos, tienen un alto potencial de valorización a través de su reutilización y reciclaje, los que aumentan mediante la introducción de nuevas tecnologías.
Como socios estratégicos de un amplio abanico de industrias, quisimos realizar un estudio de la cadena de envasado para conocer las vías prioritarias de sustentabilidad. Se entrevistó a un total de 37 empresas de los distintos eslabones de esta cadena -y que representan segmentos como pinturas y barnices, adhesivos, laminados, etiquetas, películas, papel y cartón- con el fin de identificar retos, prioridades y posibilidades de progreso. Las vías de sustentabilidad evaluadas incluyen el destino, determinando si el material es reciclable, biodegradable, compostable o repulpable; el contenido, con materias primas recicladas o una fuente renovable; la eficiencia en el proceso, y la reducción de materiales en la producción.
Durante las entrevistas identificamos los mayores desafíos del mercado: para los formuladores es la distancia con las marcas fabricantes – que son las tomadoras de decisiones – y la dependencia de la inversión. Para los proveedores de sustratos se destacó la incorporación de residuos reciclados frente a la regulación del mercado alimentario, la disponibilidad regular de material reciclado. También el límite de la innovación tecnológica para reducir el grosor del envase y el desarrollo de estructuras de un solo material. Los convertidores sienten la presión de ambos lados de la cadena, siendo el costo el factor predominante para las elecciones de sus empaques, así como la necesidad de mayores inversiones para la adopción de tecnologías más sostenibles. Por último, las marcas deben enfrentar los plazos para cumplir con los objetivos de sostenibilidad, la evaluación del costo versus su funcionalidad, además de los obstáculos para garantizar una mayor reciclabilidad de los materiales.
Como industria estamos comprometidos con la sustentabilidad a través de la creación de nuevos materiales que faciliten este proceso. Por ejemplo, soluciones barrera reciclables para envases de papel y cartón, bandejas para microondas y bolsas para alimentos congelados que reemplazan al polietileno. Las soluciones de resinas y aditivos para tintas de impresión de base acuosa garantizan la salud y seguridad de los operadores. Algunas de las cuales permiten reducir el gramaje de la tinta y tienen un porcentaje considerable de contenido renovable. En la línea de adhesivos, existen productos compostables y amigables con el reciclaje, entre otros el adhesivo de delaminación a base de agua que separa el PE del PET y permite el reciclaje de envases multicapa.
La sustentabilidad no consiste en sustituir los envases, sino en optimizarlos para las necesidades más diversas. En la actualidad hay pinturas, barnices y adhesivos innovadores que contribuyen a la sustentabilidad en los proyectos más exigentes. Como parte de BASF, vivimos nuestro compromiso y propósito de crear química para un futuro sustentable y trabajamos juntos para innovar con el fin de resolver todos los retos que plantea la cadena de producción.