“Perspectivas de los factores que controlan el notable aumento de la temperatura atmosférica del norte de la Península Antártica a escala centenaria” se titula el proyecto del Dr. Francisco Fernandoy, glaciólogo y académico de Geología UNAB, Sede Viña del Mar, que cuenta con fondos del concurso Fondecyt Regular de ANID.
La Península Antártica es una de las regiones más sensibles del mundo al fenómeno del calentamiento global. En esta región del planeta se han observado cambios muy dramáticos como la desintegración de plataformas de hielo; disminución acelerada de la masa de diversos glaciares o eventos meteorológicos extremos.
Precisamente, con el objetivo de investigar los principales factores gatillantes de este proceso, el Dr. Francisco Fernandoy, académico de Geología de la UNAB, Sede Viña del Mar, lidera el proyecto Fondecyt Regular “Insights into the drivers for a remarkable atmospheric temperature increase of the northern Antarctic Peninsula in a centennial scale” (Perspectivas de los factores que controlan el notable aumento de la temperatura atmosférica del norte de la Península Antártica a escala centenaria.
El docente trabajará en una zona poca observada como son los glaciares que cubren las montañas más altas del norte de la Península Antártica.
Para ello se realizará la extracción de testigos de hielo (una perforación en el glaciar) que contiene señales químicas de la atmósfera del pasado. “Estas señales nos ayudan a reconstruir cómo eran las condiciones ambientales en esta zona donde no existen observaciones directas”, explicó Fernandoy.
Glaciares Inexplorados
“El objetivo de esta iniciativa es reconstruir las condiciones climáticas y los principales factores que controlan su variabilidad durante al menos el último siglo, de forma de comprender mejor la intensidad del proceso de calentamiento atmosférico en esta región”, informó el académico.
El investigador agregó que los glaciares de estas montañas son uno de los principales testigos del fenómeno del calentamiento global, por lo que este proyecto tiene como propósito utilizar la evidencia química contenida en ellos como un indicador de lo que está ocurriendo en esta zona tan extrema y cuáles son los principales factores que lo influencian.
“Sabemos que están ocurriendo eventos meteorológicos anómalos como fuertes periodos de derretimiento, pero no conocemos su intensidad y frecuencia. Todos estos eventos quedan registrados en la composición del hielo y lo que pretendemos es investigar estos procesos”, puntualizó el docente.
Cabe señalar, que el proyecto comenzará recién en el verano de 2024/25 en sus campañas de terreno.