Son 45 vermicomposteras que este 2023 entregará la empresa a vecinos cercanos a sus operaciones de las localidades Río de la Plata, Agoní junto a Pilpilehue y Melinka, buscando apoyarlos con la reducción de desechos orgánicos domésticos.
Salmones Camanchaca, en conjunto con Fomento Upcycling Empresarial (FUE) y CORFO, entregó 45 nuevas vermicomposteras a vecinos de Río de La Plata, Agoní, Pilpilehue y Melinka en su tercera versión este 2023.
Esta iniciativa busca promover la economía circular y hacerse cargo de dos tipos de residuos: el plástico industrial en desuso y los desechos orgánicos domésticos de las comunidades aledañas a sus operaciones bajo el programa “Boyacompostar”.
Al respecto, Pilar de La Cerda, gerente y cofundadora de FUE, explicó que es “fundamental profundizar en el aprendizaje del cuidado del medio ambiente y del valor de los residuos orgánicos, sobre todo en zonas aisladas o con menos conectividad en donde el vermicompostaje se convierte en una solución clave para el problema de la disposición final de los residuos, al reducir el volumen de la basura domiciliaria casi en un 50%. Por lo mismo, además de entregar el contenedor y sus implementos, este programa contempla capacitaciones y seguimientos por un plazo de seis meses”.
Anualmente, cada vermicompostera tiene la capacidad de transformar 180Kg de residuos orgánicos en 50Kg de abono rico en nutrientes para ser implementado en huertas. Esto es lo que reconocen los vecinos de Terao, quienes al momento de la entrega agradecieron la oportunidad ya que les permitirá “mantener una huerta sana” y “aprender nuevas habilidades” que podrán utilizar en sus emprendimientos, entre otras frases. Así, estos 45 receptáculos pueden ayudar a reducir en 14.580Kg de CO2 si son utilizados correctamente.
Alfredo Tello, gerente Técnico y de Sostenibilidad de Salmones Camanchaca, explicó el valor que tiene este tipo de acciones en donde “llevamos a cabo actividades con foco en la realidad local, entregando herramientas útiles y atingentes que le permiten a los vecinos de las localidades donde operamos mejoras en la calidad de vida. Esto es fruto del trabajo sistemático en donde abrimos espacios de comunicación directa con nuestras comunidades, por lo que estamos orgullosos de lo que hemos logrado y el impacto observado”.
El programa Boyacompostar está operativo desde el 2020, y desde entonces ha beneficiado a un total de 120 vecinos de las localidades de Ralún, Hornopirén, Melinka, Terao (Chonchi), Buill y Ayacara en Chaitén, además de las que se suman en esta tercera versión.
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