Aerabox permite reutilizar elementos como mascarillas, guantes, batas, cubre zapatos, cubre pelos entre muchos otros disminuyendo costos y evitando la gran cantidad de basura que generan.
La pandemia mundial COVID-19 extendió el uso de los elementos de protección personal (EPP) como mascarillas, guantes, batas, cubre zapatos, cubre pelos entre otros, mucho más allá de los hospitales; a situaciones domésticas, y al sector industrial que dependen de los equipos de protección personal para su funcionamiento.
Casi el 100% de los materiales para su fabricación, no son biodegradables transformándose en basura compleja con gran impacto ambiental. De esto y mucho más se hace cargo Bioaera, a través de su producto Aerabox, un sistema de desinfección de EPP que promete proteger al usuario, cuidar al medio ambiente y abrirse incluso a otros mercados transformándose en una innovadora solución.
Aerabox utiliza ozono como agente desinfectante, además cuenta con un sistema catalizador para eliminar el ozono residual, protegiendo al usuario y evitando su liberación al medio ambiente.
De esta forma permitiría que estos elementos esenciales para proteger a las personas de la exposición a patógenos y contaminantes sean reutilizados disminuyendo costos y la cantidad de basura que generan. Puede incluso extenderse a otros tipos de productos, como por ejemplo la industria hotelera con la sanitización de ropa de cama o toallas, para lo cual ya se encuentra explorando con sus partner estratégicos Enjoy, el Hospital Regional de Temuco y la Universidad de La Frontera.
Este proyecto, apoyado por el Centro de Transferencia Científico Tecnológico, HUBTEC, fue el resultado de la investigación de la bioquímica, doctora en Ciencias Farmacéuticas y experta en microbiología aplicada y dispositivos médicos, Annesi Giacaman y Fernando Sarce, arquitecto, Doctor en Ingeniería y diseño de materiales con experiencia en diseño de materiales adsorbentes.
En él también trabajaron Sebastián Rocha, Ingeniero civil en biotecnología con experiencia en el área de desarrollo y simulación de procesos de transformación de materia y energía, y prefactibilidad de soluciones tecnológicas y Claudia Sanhueza, bioquímica con experiencia en el ámbito de desarrollo de materiales de caracterización química, física y mecánica de estos.
Lanzamiento oficial
El importante lanzamiento de Aerabox se realizó en el Salón Amsterdam del Hotel NH Collection Plaza Santiago y contó con la presencia de sus creadores, representantes de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo, ANID, representantes de HUBTEC, de las empresas en alianza y otras para las cuales esta tecnología resuelve un problema relevante, y la academia entre otros.
“Apoyar y acompañar el proceso de expansión de esta EBCT (empresa de base científica – tecnológica) y a su equipo, nos llena de satisfacción y orgullo. Una tecnología de origen regional liderada por una emprendedora que es un ejemplo de la gran calidad de las capacidades que existen a lo largo del territorio nacional para, con I+D+i, resolver problemas complejos de nuestra sociedad. El impacto positivo de la ciencia a nivel económico, social y ambiental, es enorme” Afirmó Igancio Merino, director ejecutivo de HUBTEC.
En tanto, la CEO y Cofundadora de Bioaera, Annesi Giacaman, dio cuenta de la gran crisis medio ambiental y el desafío que representa, confirmando que “tenemos un problema enorme, porque de todo lo que producimos, de todas las toneladas de basura que estamos originando en las distintas industrias, sólo el 15% logra ser reciclado y se consigue la reutilización por el compostaje seguro y ese 85% restante, va a dar directo al vertedero. Es decir, se está generando un enorme daño en esta crisis medio ambiental”.
Sobre esta problemática y esta nueva tecnología, la también bioquímica comenta: “Los quiero invitar a analizar el concepto de revalorizar los residuos. Cuando hablamos de revalorización de los residuos, les estamos dando una nueva característica, la de optimizar esos residuos para poder reciclar y reutilizar. A su vez, que los dejemos de llamar residuos, sino que recursos secundarios, para reutilizarlos como materias primas secundarias para la generación de otros materiales o elementos, ese es el desafío de hoy y nosotros lo entendimos”, destacando el desarrollo y creación de un desinfectante sostenible y amigable con el medioambiente como Aerabox.
“Partimos con una cajita chica a la que le decíamos ‘arturito’, pero fue gracias al aporte de la relación científica con la UFRO, que nos apoyó mucho en su desarrollo. Luego seguimos con CORFO semilla y otras empresas. Posteriormente con HUBTEC, que nos ha ayudado muchísimo”, aseguró Fernando Sarce, CTO y Cofundador de Bioaera. Sobre el apoyo de HUBTEC, Sarce añadió que “el apoyo de sacarnos del área académica es muy difícil y tener esas conversaciones de cómo llevarlo al negocio, a transformarlo en una empresa, fue un tremendo camino”.
Finalmente, Esteban Zapata, Jefe Transferencia y Emprendimiento ANID, aseguró que “los Hubs nacen desde una iniciativa, como política pública, para llevar los resultados de investigación desde la academia hacia la industria y este es un super buen ejemplo de eso -Aerabox de Bioaera-, porque lleva a profesionales que vienen de la academia hacia una instancia de emprendimiento. Les ayuda a formar una empresa, reformularla, rediseñarla y encontrar una propuesta de valor atractiva. Esto confirma que la transferencia a través de los emprendimientos es mucho más rápida y efectiva que lo que nosotros estábamos visualizando en el ecosistema, por eso es tan importante el rol de los hubs como HUBTEC”.
