Natalia Pávez es jefe de Centro Marilmó, Agua Mar, mientras que Sonia Velásquez es jefe de Centro Río del Este, Agua Dulce. Una trabaja en agua salada y la otra en agua dulce, pero tienen desafíos similares. Las dos lideres están abriendo espacios laborales que eran poco tradicionales para las mujeres con el apoyo de Salmones Camanchaca.
Natalia Pávez, jefe de Centro Marilmó (Agua Mar): “No hay límites. Podemos hacer lo que queramos. Solo faltaba abrir los caminos para que nos desafíen”
El Centro Marilmó está ubicado en Comau, Región de Los Lagos, es liderado por Natalia Pávez, Médico Veterinario que lleva más de 5 años de trayectoria en Camanchaca. Ella es la segunda mujer de la compañía en ocupar esta posición, pero la primera en vivir en un pontón bajo el sistema de turnos junto a su equipo, integrado por 16 personas. Este centro recibe los peces desde las pisciculturas de Agua Dulce con un peso de aproximado 150 gramos para iniciar de engorda en un proceso que dura aproximadamente un año.
¿Qué sientes al abrir espacios laborales “no tradicionales” para mujeres?
Es gratificante y desafiante. A veces difícil, pero tiene muchos momentos buenos. La compañía tiene hartos planes con el tema de Equidad de Género, ponernos a hacer otras cosas y apostar por qué podemos. El cargo día a día me desafía a poder salir adelante. Obviamente, los problemas y complicación son múltiples, pero saber que uno puede, ver que otras personas lo ven así y que apuesten por ti es bueno.
¿Cuáles crees que son los principales desafíos de liderazgo?
Hay desafío en lo profesional y lo humano, entre ellos: poder llevar el grupo, salir adelante con lo que planifica la compañía, tomar las mejores decisiones, ser súper justos e ir siempre en beneficio del equipo.
¿Qué consejo le darías a mujeres que están empezando una carrera?
Que se atrevan, se puede, todo es posible, no hay límites. Podemos hacer lo que queramos. Solo faltaba abrir los caminos para que nos desafíen. Camanchaca ha trabajado mucho con el tema de la Equidad de Género. La compañía apostó por mujeres en cargos que antes no ocupaban las mujeres. Apostó por eso y creo que los resultados han sido súper positivos. Las “chiquillas” tienen que perder el miedo, atreverse, empoderarse y no encasillar ningún trabajo, ninguna labor tiene género.
¿Cómo has visto el apoyo Camanchaca?
Camanchaca ha trabajado fuertemente con el tema de la Inclusión y Equidad de Género. Muestra señales de que lo que está haciendo. Yo he recibido apoyo de todos los departamentos para que esto se pueda desarrollar. Camanchaca es una compañía que está activamente trabajando en el tema.
Sonia Velásquez, jefe de Centro Río del Este (Agua Dulce): “Todos tenemos las mismas capacidades. El género no dice que tan capaz eres de hacer una cosa u otra”
El centro Río del Este, ubicado en Ralún, Región de Los Lagos, es liderado por Sonia Velásquez, Técnico Acuícola y Técnico en Administración de Empresas que lleva más de 20 años de trayectoria junto a Camanchaca y actualmente lidera un equipo de más de 20 personas.
“He recorrido prácticamente el área de Agua Dulce completa. En particular, esta piscicultura se dedica a la etapa de desove, fertilización e incubación de ovas. Nosotros hacemos manejos de reproductores”. Estamos a 11 kilómetros de Cochamó y la mayoría de los que trabajan acá son de la zona. Tenemos el casi un 90% de personas de la comunidad”, señaló Velásquez.
¿Qué sientes al abrir espacios laborales “no tradicionales” para mujeres?
“Fue una lucha constante los primeros dos años porque sentía que tenía que estar demostrando. Ha sido una lucha, pero con apoyo. Es un desafío importante”
¿Cuáles crees que son los principales desafíos de liderazgo?
Hoy mi equipo está conformado por un 45% mujeres y 55% hombres. Hay que tener carácter para guiarlos. El liderazgo femenino tiene que ver con el compromiso y ganas. Es lo mismo que los hombres, pero a las mujeres se les cuestiona más con respecto a otras cosas, “se la podrá con esto, aquí hay mucha fuerza”, pero la cultura ha ido cambiando y hoy depende mucho de las ganas que uno tenga para hacer las cosas. No hay que ser una súper mamá o una súper trabajadora, sino que hay que tener un equilibrio en ambas cosas.
¿Cómo has visto el apoyo Camanchaca?
Los líderes de la empresa se han dado cuenta de que las mujeres se la pueden igual. Se han ido convenciendo en el tiempo. Las mujeres hacen bien su trabajo, independiente que tengan que lidiar con temas de la familia. Antes había mucho machismo, pero hoy los roles han ido buscando un equilibrio, repartiendo responsabilidades.
¿Qué consejo le darías a mujeres que están empezando una carrera?
Si te gusta el trabajo, tiene ganas y eres responsable vas a salir adelante. Todos tenemos las mismas capacidades. El género no dice que tan capaz eres de hacer una cosa u otra.
