Giannina Cerón es Ingeniera Comercial, licenciada en Ciencias Económicas de la Universidad de Santiago de Chile, Máster en Marketing e Investigación de Mercado, Diplomado en Sustentabilidad Corporativa e Innovación. Actualmente es subgerente de Sostenibilidad en SURA Asset Management Chile, donde ha liderado la estrategia y cómo ésta se integra en hacer un negocio sostenible, entendiendo el impacto que tienen las empresas tanto en sus colaboradores, clientes y accionistas, como también hacia otros grupos de interés, como la comunidad en la que está inserta, medios de comunicación, reguladores, etcétera.
¿Cuáles creen que son los desafíos relacionados a los criterios ESG?
Los desafíos que existen hoy, mirando las tendencias generales, tiene que ver con los riesgos a nivel internacional y la crisis múltiple entre lo social, climático y sanitario que se está viviendo. Esto nos desafía a ver cómo nos hacemos cargo de una pobreza multidimensional, de todas las transformaciones que está viviendo el mundo del trabajo, la transición que hay que tener en las matrices energéticas sostenibles, pérdida de biodiversidad y emergencia climática, lo que se traduce en un mundo de desafíos para este año que las compañías y personas debemos hacernos cargo.
¿Qué te parecen los avances en regulación y normativas?
Por otro lado, algo interesante que está pasando es lo que tiene que ver con la normativa, tanto en Europa como países de Latinoamérica como Colombia y Chile. Se está regulando para cumplir con estándares y entregar información que transparente qué se entiende por sostenibilidad como parte del negocio y no como algo aparte. Desde ahí nace, por ejemplo, la Norma de Carácter General N°461, y de la mano, todo lo que tiene que ver con reportabilidad, cómo cumplir los estándares, o desde lo particular, desde las inversiones sostenibles, cómo los grandes inversionistas institucionales podemos hacer algo en términos de entender el impacto que generamos.
¿Y el gobierno corporativo?
Otro desafío tiene que ver con el Gobierno Corporativo, que es cómo las compañías hoy se preocupan de tener buenos y diversos directorios, independientes, involucrados en la estrategia de sostenibilidad, los marcos de actuación de los colaboradores, la ética, valores, principios, cuidado de los datos, ciberseguridad, entre otros.
¿Cuáles creen que son las principales barreras?
Creo que la barrera más grande es la priorización, el ver cómo dentro de los diferentes desafíos que tenemos nos hacemos cargo de las brechas, oportunidades o riesgos. Para ello es importante la escucha permanente, la conexión con el negocio, el marco de actuación tanto regulatorio como de gobernanza y, de esta manera, cumplir el propósito de cada compañía. Siempre será difícil priorizar y ver con qué se parte, pero hay metodologías que uno puede implementar, como es el proceso de materialidad.
Por otro lado, entender que la sostenibilidad no es una moda es una barrera importante, ya que es una forma de hacer negocio. Esto habla de cómo la sostenibilidad entra en una convicción de hacer las cosas bien, lo que se traduce en estrategias, gestión, reportabilidad, gobernanza y metas claras de cómo cada una de las compañías aportan al desarrollo sostenible de cada país.
Por último, desde la vereda de la inversión sostenible, la principal barrera es el acceso y homogeneidad de la información disponible, por lo que iniciativas que permitan mayor transparencia en contenidos públicos de las empresas generan que los inversionistas institucionales puedan profundizar y tomar mejores decisiones de inversión.