Fue lanzado el satélite Surface Water and Ocean Topography (SWOT) desde Estados Unidos, en lo que se ha denominado una fecha histórica para las Ciencias de la Tierra, ya que tendrá la capacidad inédita de medir el tamaño, profundidad y flujo de millones de ríos, lagos, lagunas y zonas costeras del planeta. Para Chile es además relevante porque existe un chileno que es parte del Comité Científico de la misión, el Dr. Rodrigo Abarca del Río, del Departamento de Geofísica de la Universidad de Concepción.
El lanzamiento fue realizado en un cohete SpaceX Falcon 9 desde el Space Launch Complex, en la base de la Fuerza Aérea Vandenberg, en California.
El satélite SWOT –llamado el Hubble de las Ciencias de la Tierra- tendrá una tarea fundamental en medir las variaciones del ciclo del agua del mundo y, por lo tanto, comprobar los cambios que se produzcan principalmente por la crisis climática que conlleva el aumento de temperatura del planeta y efectos regionales de sequía e inundaciones, cambios en los niveles de los hielos, lagos y ríos.
“En el caso de Chile podremos hacer estudios de nuestros ríos y lagos, variaciones de los campos de hielo y los efectos de la sequía, pues en nuestro país casi no existen instrumentos para medir en terreno, por lo que esta innovación mundial permitirá un gran salto para la ciencia nacional y planetaria”, destacó el doctor en Geofísica de la UdeC y experto en Geodesia Espacial e Hidrología Climatológica.
El además responsable del proyecto científico en América del Sur, junto a un equipo de investigadores brasileños y un peruano, explicó que tras el lanzamiento de hoy se deberá hacer una calibración y validación de datos del satélite en distintas partes del mundo. Es decir, la información que entregue el satélite debe ser corroborada en terreno, tarea que también desarrollará Abarca en Chile, acompañado por el Investigador Principal del proyecto, el científico francés Jean Francois Cretaux, Dr. en Altimetría Satelital y Geodesia Espacial.
Por ello, ambos viajarán en febrero al Lago Fagnano, en Tierra del Fuego, para realizar ese trabajo de observación y medición que será comparado con los datos que capture el satélite SWOT del mismo cuerpo de agua. “Lo mismo haremos en el Río Bío Bío y en lagos del sur de Chile”, destacó el Dr. Abarca.
La información que recoja el satélite estará disponible para cualquier persona luego de seis meses de exclusividad para quienes organizaron y financiaron la misión espacial. “Ello permitirá mejorar muy fuertemente la investigación de los procesos oceanográficos e hidrológicos de Chile y del planeta”, contó entusiasmado el profesor de Geofísica de la U. de Concepción.
La misión SWOT, con su tecnología de altimetría e interferometría de radar, podrá cubrir todos los cuerpos de agua superiores a 100 metros de diámetro con mediciones repetidas de elevación de alta resolución, proporcionando observaciones de detalles finos de la topografía de la superficie del océano y midiendo cómo cambian lagos y ríos a lo largo del tiempo. Los datos proporcionarán información crítica que se necesita para evaluar los recursos hídricos en la Tierra, rastrear los cambios regionales del nivel del mar, monitorear los procesos costeros y observar corrientes y remolinos oceánicos a pequeña escala.