En concreto, se continuará implementando acciones para resguardar el éxito reproductivo del Pilpilén en el Santuario y promover la tenencia responsable de mascotas para disminuir uno de los disturbios más sensibles en el área.
Cuatro años sin eclosión y sobrevivencia de polluelos de Pilpilén (Haematopus palliatus) registraba el Santuario de la Naturaleza Humedal Río Maipo hasta la temporada 2021-2022, periodo en que, gracias a los esfuerzos de distintas organizaciones y expertos en conservación, terminó con el nacimiento de los primeros tres polluelos de esta ave en categoría de “Casi Amenazada”, según el reglamento de Clasificación de Especies Silvestres (RCE).
Con el objetivo de aumentar la tasa de éxito reproductivo de esta especie y superar los resultados de la temporada anterior, la ONG estadounidense Manomet que alberga a la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras-, inició una nueva colaboración con Fundación Cosmos, administradores del Santuario de la Naturaleza Humedal Río Maipo, para implementar acciones de conservación para el Pilpilén. Anteriormente, ambas instituciones se articularon exitosamente en la construcción participativa del mecanismo de gobernanza para el Santuario y manejo de hábitats críticos para las aves playeras.
El trabajo colaborativo de esta nueva etapa considera la instalación de un cerco de 7.500 metros cuadrados para la exclusión de amenazas y perturbaciones -como perros de vida libre, zorros chilla y el tránsito de personas- en el hábitat crítico usado para anidación del Pilpilén y el monitoreo del área durante la temporada reproductiva de septiembre 2022 a marzo 2023.
Diego Luna Quevedo, Especialista en Política y Gobernanza de Manomet Inc., explica que “los monitoreos realizados durante los últimos años para evaluar sobrevivencia del Pilpilén en playas de la costa central de Chile muestran éxito reproductivo cercano a 0%. Similar situación ocurre con el Chorlo nevado (Charadrius nivosus). La positiva experiencia de ciencia y manejo que estamos apoyando en el Santuario Humedal Río Maipo es replicable a otras playas de Chile”.
El Pilpilén Común anida en dunas y playas, lo que los hace propensos a ser depredados por perros, ya sea domesticados o de vida libre. Además, sus huevos tienen la particularidad de mimetizarse con la arena y muchas veces son destruidos por el tránsito de vehículos o personas caminando por zonas de anidamiento. En razón de lo anterior, la colaboración entre Manomet y Fundación Cosmos incluye el diseño e implementación de una campaña de educación ambiental y sensibilización enfocada en la Tenencia Responsable de Mascotas, incluyendo actividades comunitarias in-situ, trabajo en un monitor en el sector playa Marbella-humedal y difusión de material informativo de manera presencial y en redes sociales.
Diego Urrejola, director ejecutivo de Fundación Cosmos, destaca que “la experiencia acumulada, los aprendizajes y el intercambio de conocimientos entre las distintas organizaciones que hemos colaborado para el éxito reproductivo del Pilpilén Común la temporada anterior, nos impulsa a redoblar esfuerzos para mejorar los resultados en el actual periodo reproductivo. Con Manomet como aliados, esperamos lograr los objetivos de conservación que nos planteamos y, además, involucrar a la comunidad para avanzar hacia un cambio cultural en nuestra relación con la naturaleza, respetando el hábitat y los ciclos de vida de distintas especies”.
Para ejecutar estas acciones de conservación y educación ambiental, Fundación Cosmos trabajará de manera coordinada y colaborativa con el Ministerio de Medio Ambiente, las Municipalidades de San Antonio y Santo Domingo, organizaciones locales y la comunidad.
Ubicado entre los municipios de San Antonio y Santo Domingo, el humedal del río Maipo ofrece una variedad de hábitats costeros y estuarinos para aves playeras. Durante 2015, un total de 140 hectáreas fueron designadas como sitio RHRAP, debido a la importancia del área para el Zarapito (Numenius phaeopus) y la subespecie pitanay del Pilipilén (Haematopus palliatus). En diciembre 2019 se declaró el Santuario de la Naturaleza que abarca 60 hectáreas.
