Uno de los últimos informes de UNICEF (2021), que analiza el estado mundial de la infancia revela que existe una carga importante de necesidades de salud mental no atendidas en los niños y niñas de América Latina y el Caribe.
La situación anterior se ha agravado en Chile a consecuencia de la pandemia, cómo reflejan los resultados de la encuesta “Cuidemos a Nuestros Niños” (2020). En esta, se detalla, conforme la percepción de los cuidadores, como la mayoría de las y los niños entre 0 y 11 años han sufrido producto del confinamiento, cuadros de ansiedad y estrés, trastornos del sueño y del apetito, así como cuadros de ansiedad por separación. A su vez, un 48% de las madres, padres y cuidadores encuestados refiere que dentro de los aspectos que han sido más difíciles de manejar en el contexto de la pandemia, es el contener las emociones de las y los niños. En este sentido, un 61% percibe que aumentaron las conductas externalizantes, en particular la reactividad emocional, y un 29% reporta observar un aumento de conductas como cambios de humor súbito (Proyecto Cuidemos a Nuestros Niños, 2020).