José Manuel Barros, CEO y cofundador de Time Jobs
Comercio ambulante, inseguridad, maltrato laboral, salarios precarios e injusticia. Estas son sólo algunas de las consecuencias que trae consigo el trabajo irregular o informal en nuestro país.
Y las perspectivas en la materia no son alentadoras. Según el último boletín estadístico sobre Informalidad Laboral elaborado por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), los ocupados informales aumentaron en un 13,3% en el trimestre octubre-diciembre del año 2021, lo que equivale a 288.393 personas.
Un problema que ha empeorado bastante con el paso de los años, sobre todo con la pandemia y las altas cifras de desempleo que vinieron con ella, y que parece no tener una solución cercana, pero que todos los días vemos cómo afecta a miles de personas y a sus respectivas familias.
Esto debe acabar y debemos ser capaces de entregar soluciones a las personas (y las completas familias detrás de ellas) que deben recurrir a estos empleos para subsistir. Y hacerse cargo, en este sentido, implica avanzar en regularizar puestos de trabajo.
La buena noticia es que hemos visto que desde los mundos privado y público surgen soluciones para abordar estos problemas. La reactivación económica y los desafíos de la tecnologización de las economías han hecho crecer las vacantes laborales en las áreas de retail, logística, bodegaje y última milla, entre otras, generando nuevos puestos que son cada vez más demandados en la industria. Y muchas startups surgen buscando organizar estos nuevos spots de trabajo, brindando oportunidades a las personas que las buscan y soluciones a las empresas que necesitan de estas de manera urgente.
La innovación y el hacer las cosas de forma distinta serán claves a la hora de disminuir el desempleo y la informalidad en el mercado laboral, creando nuevas y diversas oportunidades, pensando en todos aquellos que se han visto sumamente afectados por todo el contexto social, sanitario, político y económico que atraviesa tanto el país como el mundo entero. Y es en este momento, donde las startups nos levantamos y hacemos frente al desafío.