El hidrógeno verde hoy ocupa un lugar importante en el escenario mundial, como fuente de energía limpia, mientras que la expectativa de demanda y los abundantes recursos regionales crean oportunidades para que América Latina se posicione como una potencia mundial en H2.
¿Cómo superar los desafíos de la producción comercial de hidrógeno a gran escala en América Latina? ¿Qué condiciones se necesitan para permitir la cooperación internacional y las alianzas?
Destacan los sectores de la movilidad, industria y energía como principales oportunidades.
En el panel de la Energy Week LATAM, “Impulsando la revolución del hidrógeno en América Latina – De la esperanza a la realidad”, expertos y referentes de la industria compartieron sus visiones en cuanto al rol que tendrá América Latina en la producción de hidrógeno verde, sus principales oportunidades, así como también los desafíos que enfrenta la región para el desarrollo de esta industria. Los voceros coincidieron en la gran oportunidad que presenta América Latina para el desarrollo del mercado del hidrógeno y el importante rol que la región podrá cumplir en la transición energética.
Karl Spencer-Armond, líder de New Energy Business and Decarbonized Solutions para las Americas en Siemens Energy, compartió su visión: “América Latina está bendecida con grandes recursos en términos de energías renovables, lo cual la posiciona para ser productora de combustible, no solo de la región sino a escala global. El crecimiento de los proyectos que están en América Latina puede ayudar a la descarbonización también de otras regiones.”
Para el caso de Colombia, Andrés Rodríguez Torres, líder de la iniciativa de Hidrógeno de EcoPetrol, comenta que desde la compañía esperan tener $ 2,5 M de inversión hasta 2040. “Tenemos las características que pueden en el futuro tornar a Colombia en un usuario de hidrogeno en el mundo. Debemos construir toda la estrategia junto a las mejores compañías en el mundo, por ejemplo, en Alemania estamos trabajando con Siemens Energy, a fin de desarrollar este plan en Colombia” aporta.
Para el caso de Brasil, Scott Lata, presidente de Messer, argumenta: “La oportunidad en Sudamérica es grande para el hidrógeno. Por nuestra parte, tenemos negocios en Chile y en Colombia, pero en Brasil en particular hay un gran momentum que se ha ido creando, considerando la cantidad y la escala de los proyectos de los que se está hablando. Las oportunidades son muy fuertes y los recursos naturales -el viento y el sol- están aquí. El resto depende de nosotros. Debemos ver como lo podemos aplicar para verdaderamente hacernos verdes.”
En cuanto a los desafíos que presenta América Latina en este escenario, César Norton, presidente de HIF Chile, opinó: “Estamos bendecidos por los recursos en América Latina. Los elementos clave están. Pero necesitamos tener una idea clara de las condiciones para poder tener una verdadera descarbonización.” Y continuó: “El mercado latinoamericano muestra condiciones ideales para la exportación a otras regiones. Pero debemos tener claridad para poder hacer estas inversiones. La meta es trabajar para descarbonizar y hay un consenso en ese sentido de la oportunidad enorme en América Latina para poder trabajar con estas nuevas unidades en el mercado.” Pero concluye: “Necesitamos certeza.”
Continuando ese punto, Spencer-Armond de Siemens Energy aportó: “El hidrogeno es una molécula fantástica para ser trasmisor de energía para varios sectores. Es una gran oportunidad, pero es una oportunidad muy desafiante, principalmente por sus costos de producción. Por eso necesitamos incentivos para que sea posible.”
Norton concluyó que “no es una receta mágica: la descarbonización es un gran reto para todos nosotros. Debemos hacer esto de manera seria, necesitamos un gran cambio en el mundo y un consenso de cada vez más países. El tiempo que tenemos es cada vez menor y es por eso que estamos haciendo las cosas hoy.”
¿Qué marco regulatorio se necesita?
Por su parte, Spencer-Armond explica que el enfoque debe estar en la descarbonización, pero que debe ser progresivo. “El primer paso es tener requerimientos obligatorios de descarbonización y establecer medidas para incentivar el crecimiento de esta industria. A medida que los requerimientos se implementen, los incentivos para el crecimiento del sector del hidrógeno verde aumentarán, así como también la escala de su fabricación, utilización y producción” argumentó.
Rodríguez Torres, por su parte, dice “El conocimiento es el primer paso. Las barreras que tenemos están, pero las tenemos que trabajar. Queremos comenzar con una base un poco más rápida pero no es tan fácil. Es importante a fin de tener un desarrollo más rápido de esta industria.” “En Colombia el apoyo del gobierno nacional es importante: debemos estar alineados y trabajar en conjunto. No es una competencia, sino que una contribución. En términos del desarrollo de este negocio necesitamos estar juntos y trabajar así. Un marco regulatorio fuerte es importante en nuestros países. Para poder saber cómo desarrollar este negocio en nuestros países y en la región”, concluye.
¿Qué sectores presentan oportunidades?
Spencer-Armond indica: “La meta es la descarbonización en todo el mundo. Pero vemos algunos focos prioritarios: la movilidad, la industria y la producción de energía. Si bien hoy en el sector energético el hidrogeno no es ideal, en el futuro lo será. Mismo que tendrá un gran papel en la aceleración de la descarbonización en la movilidad y en la industria.”
Lata enfatizó en el potencial del sector de la movilidad particularmente con el hidrógeno líquido. “Tenemos conocimiento en ese sentido y la oportunidad para entrar en el segmento del transporte es real”, comentó.
Como conclusión, Rodríguez Torres enfatizó en la necesidad de colaboración entre países y la importancia de organizarse como continente a fin de ser fuertes en el futuro. Además, los expertos destacaron la importancia de la cooperación con empresas y gobiernos para el desarrollo de esta industria. Lata comentó que socios como Siemens Energy, que traen la tecnología son clave y Norton desde Chile también remarcó la importancia de formar sociedad con el gobierno alemán para hacer esta transformación posible.