El principal sector elegido para nuevos emprendimientos, tanto de hombres como de mujeres, es la oferta de servicios con un 38%de los negocios. El segundo lugar se lo lleva el sector comercio, aunque en este caso, las mujeres con 34% de sus emprendimientos casi duplican el 19% de participación de los hombres. El tercer lugar es para la industria, con una mayor participación masculina de 18% contra sólo 7% entre las mujeres.
En los últimos años el emprendimiento femenino ha tomado un rol central en el desarrollo de los países, aportando a la innovación y a la creación de nuevos empleos. Junto con esto, la pandemia y sus impactos económicos motivaron especialmente a las mujeres a buscar alternativas emprendedoras que le permitiesen financiar sus necesidades. Esta realidad fue recogida por el estudio “Emprendimiento en Chile: Una Mirada de Género”, realizado por la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS), en el marco de la conmemoración del Mes de la Mujer. Este estudio, se suma a una serie de iniciativas que llevará a cabo la institución, entre ellas, la campaña Trabajadora con A de ACHS, que también busca visibilizar la importancia de las trabajadoras para el país.
Una de las principales conclusiones de la investigación es que, aunque hombres y mujeres enfrentan desafíos similares al emprender, a ellas les cuesta más convencerse de la conveniencia de formalizar sus nuevos negocios. De hecho, el 14% de las mujeres emprendedoras encuestadas a través de redes sociales constituyeron sus empresas legalmente, contra un 18% de los hombres. Las principales dificultades mencionadas para este proceso son llevar la contabilidad y pagar los impuestos, seguido por la burocracia y trámites necesarios para obtener los permisos municipales y cumplir otros requerimientos locales.
Camila Zacharías, gerente División de Personas de la ACHS, afirmó que el estudio fue elaborado debido a que “en esta nueva conmemoración del Día de la Mujer, queremos hacernos parte en el reconocimiento a todas las mujeres trabajadoras de Chile, que luchan cada día por generar los cambios y avances que nos lleven hacia un país con verdadera igualdad de oportunidades para todas las personas. Por esto, quisimos identificar y caracterizar las brechas existentes, entendiendo que el emprendimiento de hoy es la empresa del futuro, razón por la cual es necesario promover un emprendimiento de calidad, con empleos formales, que permita y facilite el acceso a seguridad social, especialmente a aquellas mujeres que siendo jefas de hogar, han tomado roles fundamentales para sostener a sus familias y la economía del país”.
Características del emprendimiento
Según el estudio de la ACHS, tanto hombres y mujeres emprenden comúnmente en servicios (38%), seguido por el sector comercio, donde las mujeres casi duplican a los hombres, con un 34% y 19% respectivamente. En sectores industriales los hombres se ven representados con un 18% y las mujeres un 7%.
Otra cifra que destaca del análisis, es que antes de emprender, los hombres tenían un cargo más alto que las mujeres, donde un 34% era gerente o subgerente, en comparación a un 9% de las mujeres.
Por otra parte, uno de cada dos emprendimientos liderados por mujeres trabaja con entre 2 y 5 personas. En tanto, menos del 2% de los emprendimientos liderados por mujeres emplea más de 20 personas, en comparación al 10% de los que son liderados por hombres. Además, las mujeres hace un mayor uso de la tecnología, en efecto sólo un 33% del emprendimiento femenino es totalmente físico, mientras que el 41% del emprendimiento masculino utiliza esa modalidad.
Motivaciones y desafíos para emprender
Según los resultados arrojados por el estudio, un 18% de las mujeres que emprenden lo hacen para lograr un mejor equilibrio entre su vida profesional y familiar y un 16% lo hacen buscando nuevos desafíos, cifras que contrastan con el 12% y 23% de los hombres. La pandemia aumentó la importancia de temas financieros como motivación para emprender, y sorprendentemente, evitar el desempleo no varió mayormente manteniendo un 11% de las menciones tanto en hombres como mujeres emprendedoras.
Por otro lado, solo el 2,5% del total de la muestra indica que no le interesa emprender y un 11% de las personas menciona su situación familiar como motivo para no emprender, sin grandes diferencias entre hombres y mujeres.
En cuanto a los desafíos de los emprendedores, los que más se mencionaron ambos géneros, son aquellos propios del negocio, tales como acceder a financiamiento (27%) y dificultad de establecer el contacto con cliente (17%). En tercer lugar, destacan la burocracia y restricciones legales necesarias para operar (12%). En esta línea, las mayores brechas están en la dificultad para poner precio a los productos, con un 10% en mujeres y 7% en hombres 7%. Así también, la dificultad cobranza y facturas impagas se presenta como un desafío importante para hombres (7%) y mujeres (4%).
Elementos técnicos del estudio:
Estudio exploratorio a través de una encuesta online autoadministrada a la base de datos de Pymes ACHS y a través de redes sociales, a personas entre 23 y 68 años. La muestra total es de 407 personas, que participaron del estudio entre el 25 de enero y 21 de febrero de 2022.
