Karen Basfi-fer, Presidenta de la Sociedad Chilena de Nutrición (SOCHINUT)
El COVID-19 impactó en la salud de las personas e hizo que cambiaran sus hábitos de alimentación. Buscar alimentos más saludables y con mejores propiedades nutricionales se volvió primordial para fortalecer el sistema inmunológico.
Además, generó que las personas se preocuparan más de la inocuidad alimentaria y la higiene de los alimentos. Según, el Índice de Tetra Pak 2021, casi dos tercios de los encuestados tienen la sensación de que “estar saludable es estar seguro”. Algo que es fácil de entender, pues luego de dos años de pandemia todo lo relativo a higiene y salud tomó una relevancia nunca antes vista a nivel mundial.
El mismo estudio indicó que los consumidores están prestando atención a los ingredientes de lo que comen, es decir, leen las etiquetas de los alimentos y buscan consejos nutricionales, además de buscar ingredientes naturales, bajo contenido de grasa o azúcar, entre otros.
Escoger alimentos sean más funcionales para aumentar el sistema inmunológico y que ayuden a la salud intestinal o a la salud mental es una tendencia beneficiosa para las personas. Y estas elecciones suelen ser mejores cuando se consumen en el hogar, pues tenemos mayor control del tipo de comidas que consumimos.
Por ejemplo, usar condimentos como jengibre o cúrcuma ayudan a fortalecer el sistema inmunológico, además de mejorar la digestión. El consumo de cítricos como naranjas, pomelos y limones, ricos en vitamina C, también son excelentes alternativas para el sistema inmune.
La adopción de hábitos más saludables y seguros enfocados en nuestro bienestar físico y mental es el saldo positivo que nos deja esta crisis. Aprovechemos esta oportunidad para hacer mejores elecciones nutricionales no sólo para fortalecer nuestra inmunidad contra enfermedades, sino para llevar un estilo de vida más sano para nuestro cuerpo y mente.