En Chile, se generan al año 86,7 mil toneladas de plástico por empaquetar latas de cerveza. Asimismo, la industria cervecera genera como principal subproducto más de 150 mil toneladas anuales de orujo de cebada.
Como una forma de darle revalorización a este material nace B-CYCLE, un proyecto apoyado por Corfo y fundado por lo ingenieros UC, Janus Leonhardt Gutiérrez y Carlos Hinojosa Apud que elabora un packaging de cervezas desarrollado en base a orujo de cebada, biopolímeros compostables y aditivos orgánicos. El producto consiste en un soporte superior de latas, que permite encajar seis envases de cerveza en su parte inferior.
Con este emprendimiento, se busca resolver el problema del uso de plásticos en el empaquetado de cervezas a partir de un residuo que actualmente es subutilizado por la industria, revalorizando así los desechos que estas empresas generan bajo el concepto de a economía circular.
“Esto permitirá que los productores de cerveza no se vean expuestos a la necesidad de recolectar residuos plásticos ni a las sanciones económicas asociadas a la Ley REP, dado que este producto podrá ser compostado a gran escala o reutilizado por los usuarios”, explica Carlos Hinojosa Apud, co-fundador de B-CYCLE.
Agrega que con esto se reduce en un 76 por ciento la cantidad de plástico que producen las empresas cerveceras, disminuyendo su impacto en el entorno y el consumo humano.
Gracias a la adjudicación del instrumento Semilla Inicia de Corfo, esta empresa se encuentra trabajando en el escalamiento productivo de su solución para lograr una alta velocidad de producción en serie junto a la Unidad de Desarrollo Tecnológico de la Universidad de Concepción, lo que les ha permitido consolidar un acuerdo con la Multinacional ABInBev, mayor productora cervecera a nivel mundial que posee el 25% del mercado global, en un ambicioso plan para escalar esta solución sustentable.