Salmón, atún y mariscos son algunas de las opciones elegidas por las personas para mantener una dieta alta en Omega 3, pero ¿Cómo los pueden reemplazar las personas veganas?
El consumo de ácidos grasos Omega-3 es beneficioso desde el inicio de la vida. Estudios respaldan que tanto las embarazadas y lactantes deben considerar en su alimentación el consumo de grasas Omega-3 debido al importante papel de éstas en el desarrollo del cerebro fetal y del bebé. Por otra parte, los Omega-3 contribuyen a prevenir diversas enfermedades, desde afecciones de la piel, el cáncer e incluso Alzheimer.
Un reciente estudio realizado por Ipsos Chile y Fundación Vegetarianos Hoy reveló que un 36% de los chilenos ha intentado disminuir el consumo de alimentos de origen animal, entre ellos los pescados y mariscos, mientras que un 16% se identifica con alguna alimentación principalmente basada en vegetales (vegetarianas/veganas).
Ante esta realidad, es sustancial informar sobre la necesidad de reemplazar las fuentes animales, principalmente marinas, de grasas saludables por otras de origen vegetal, de esa manera podemos evitar una deficiencia de estos nutrientes esenciales.
Una de las fuentes vegetales más ricas en Omega-3 es la Chía. Carolina Chica, nutricionista de Benexia, empresa productora de Chía de nivel mundial, recomienda:
“Una cucharada de semillas de chía o 1 cucharadita del mismo, contienen los requerimientos diarios de Omega-3”. Así también, alimentos en base a esta semilla como pastas SOW o bebida vegetal de chía SOW, aportan un excelente porcentaje de estos ácidos grasos.
También puede ser 2 cucharadas de semillas de cáñamo y 6 unidades de nueces.
Una alimentación basada en plantas (vegana/vegetariana) correctamente balanceada, puede ser suficiente para aportar todos los nutrientes esenciales y mantener una buena salud. No obstante, tal como los estudios demuestran, la mayoría de quienes se alimentan basados en plantas consumen cantidades bajas de Omega-3, por lo que se hace de vital importancia un aumento en el consumo de alimentos vegetales ricos en estos ácidos grasos, para garantizar un óptimo equilibrio en la salud de las personas.