Desde su creación en 1926, el Parque Nacional Vicente Pérez Rosales protege la naturaleza, conserva la biodiversidad y, especialmente, permite que cientos de miles de visitantes al año se conecten con la naturaleza y disfruten de este lugar ícono del sur de Chile, legado de nuestros antepasados para las generaciones actuales y futuras. ¿Cómo se conecta el pasado con el presente en estos 95 años de historia?
Desde los primeros habitantes que tuvo el territorio, al establecimiento de la categoría parque nacional hubo una decisión que buscaba, por un lado, fomentar el turismo y, por otro, conservar la naturaleza. A lo largo de los años y reforzado por convenios internacionales de conservación a los que adhirió Chile, los parques nacionales tienen hoy su foco principal en la protección y conservación de las bellezas escénicas naturales y de la flora y la fauna de importancia nacional, de las que el público pueda disfrutar mejor al ser puestas bajo la vigilancia oficial, según indica CONAF en base a las definiciones que surgen de la Convención Washington sobre conservación.
“Invitamos a los visitantes a conectarse con la historia natural y cultural que existe en este parque nacional, el más antiguo y el más visitado de Chile. A que vayan más allá de la postal y puedan encontrar las huellas de los primeros habitantes que han convivido en este lugar, sus mamíferos, sus flores, sus árboles, sus cuerpos de agua, y también los antepasados”, dice el director de Conaf en la región de Los Lagos, Jorge Aichele.
Para ello es clave informarse sobre las innovaciones que tiene este parque, planificar la visita en cuanto a horarios y senderos, anticipar la compra de la entrada en aspticket.cl y descargar el código QR antes de llegar al parque, el que será solicitado antes del ingreso a Saltos de Petrohué. El Parque Nacional Vicente Pérez Rosales se encuentra abierto lunes a domingo de 9:00 a 17:00 hrs.