La conclusión del reporte de BlackRock Investment Institute, empresa que ofrece una amplia gama de soluciones para instituciones y profesionales financieros, es que los mercados emergentes requieren al menos un billón de dólares por año para lograr emisiones netas cero para 2050. Esto es más de seis veces la inversión actual.
Según se afirma en el estudio, sin una transición verde, el riesgo climático es inimaginable. En ese sentido, los mercados emergentes son clave para la transformación global ya que, hoy en día, representan el 34% de las emisiones de carbono. Por eso, necesitan más capital para financiarse.
Para alcanzar los objetivos climáticos acordados a nivel mundial y reducir en un 50% las emisiones para el 2030, los mercados emergentes son cada vez más importantes, ya que gran parte de la necesidad de la inversión de capital está ahí. Sin embargo, no son capaces de cumplir con sus necesidades de inversión por sí solas, y no hay suficientes.
Es por eso, que la financiación pública o privada, principalmente de los países desarrollados a los países en vías de desarrollo, es necesaria. En ese sentido, urge que se aborde el problema masivo déficit de financiación climática en estas naciones.
El déficit actual
Según un informe de la Agencia Internacional de Energía, en 2020 la inversión en descarbonización en mercados emergentes ascendió a sólo US$150 mil millones por año y esto es solo una sexta parte de lo necesario.
BlackRock afirma que el objetivo -aún no cumplido- que propuso la ONU de que los mercados desarrollados movilicen US$100 mil millones anuales de financiamiento público y privado, para que los mercados emergentes transiten al objetivo, no es suficiente. “Vemos la necesidad de US$100 mil millones en forma de recursos presupuestarios públicos (financiamiento equivalente a donaciones) solo, para llegar al billón por año”.
“Las necesidades de inversión de, al menos, $1 billón de dólares al año son demasiado altos para los contribuyentes. Entonces, el componente privado debe ser masivo ampliado, y rápidamente, en nuestra opinión, dado el potencial Consecuencias de una transición verde con financiación insuficiente en los mercados emergentes para el mundo entero”.
Las dificultades mostradas en el informe
En primer lugar, las medidas tomadas por los bancos mundiales de desarrollo (BMD) e instituciones financieras para disminuir los riesgos “han sido a una escala demasiado pequeña. Gran parte de sus préstamos se han hecho en tasas inferiores a las del mercado, que desplazan al capital privado y evitan el desarrollo de los mercados emergentes”.
En segundo lugar, a pesar que el monto para financiar la transición es teóricamente abundante, el capital privado no fluirá lo suficiente hacia los mercados emergentes sin más riesgo. “El cambio climático no esperará por los mercados emergentes para emprender reformas institucionales o convertirse en grado de inversión”.
“Si bien se pueden realizar esfuerzos paraa abordar los problemas estructurales, si se toma en serio la reducción de emisiones globales a la mitad en 10 años, se debe actuar ahora dentro de la arquitectura financiera de mercados emergentes existente”.
La solución que propone BlackRock
“Consideramos que la única forma de superar estos obstáculos – dentro del marco de tiempo necesario es para países que pueden permitírselo para ofrecer una mayor oferta de recursos presupuestarios públicos para absorber las pérdidas potenciales-es que el capital público se ponga en riesgo. Las finanzas públicas han demostrado tener éxito en la atracción de capital privado porque proporciona a los inversores exposición a mercados emergentes a un menor nivel de riesgo”.
Una variedad de instituciones están tomando medidas en pos de los objetivos, aunque la mayoría están en etapa piloto:
Joe Biden anunció que para ayudar a los mercados emergentes a lidiar con el cambio climático es necesario duplicar fondos a US$11,4 mil millones por año. Sin embargo, esta cantidad se enfoca en el objetivo de la ONU de US$100 mil millones de financiación mixta pública y privada al año. “En particular la parte compuesta por los recursos presupuestarios públicos debe ser aún mayor para atraer el nivel de financiación privada necesario”.
Para llegar a la inversión de $1 billón (seis veces la actual inversión) y aumentar el volumen de recursos públicos a US$100 mil millones anuales, deben tomarse riesgos y generar proyectos novedosos. “Esto puede ser visto como un costo enorme para los mensajes directos, pero creemos que representa una inversión imprescindible. Esto es sólo una fracción de las pérdidas evitadas por una transición climática exitosa”.
BlackRock establece distintas medidas necesarias para lograr el objetivo:
• Mejores condiciones de inversiones para mercados emergentes.
• Gobernanza organizacional nacional e internacional.
• Gastos más eficientes y estructuras financieras más efectivas.
• Mayor experiencia climática en terreno.
• Una cartera completa de proyectos viables: la financiación climática no puede separarse totalmente de gasto en desarrollo, en nuestra opinión, el gasto verde también debe tener en cuenta el progreso del desarrollo de mercados emergentes y prioridades.