Vecinos, niños y niñas, junto a sus padres y el gremio forestal, plantaron árboles nativos para recuperar zona abandonada y convertirla en paisaje verde del sector y mejorar la calidad de vida de las familias residentes.
Paulownia tomentosa, Arrayán, Peumo, Maitén, Araucarias y Quillay, fueron los árboles que vecinos del sector de Villa Costa Pacífico y Evangelista de la comuna de San Pedro de la Paz, plantaron en una zona que se usaba como basural y que con gran esfuerzo la transformaron en una plazoleta.
En la actividad participaron vecinos y dirigentes vecinales, niños y niñas del jardín infantil Achnu, aledaño a la zona recuperada, personeros del sector forestal y de la seremi de Medio Ambiente.
La donación de plantas fue gestionada por el Departamento de Silvicultura y Patrimonio de la Corporación Chilena de la Madera -Corma- y la empresa Arauco, en respuesta a una solicitud de la directiva del sector para reducir la carencia de árboles, mejorar el paisaje urbano y la calidad de vida de la comunidad.
Uno de los árboles plantados fue la Paulownia tomentosa, conocida también como Kiri, que funciona de gran ayuda contra el calentamiento global, gracias a su rápido crecimiento, ya que es capaz de capturar 10 veces más CO2 que cualquier otra especie.
El Kiri fue solicitado expresamente por la fundadora social de la Coordinadora Villa Costa pacífico y Evangelista, Marisol Velásquez, quien estaba muy emocionada porque se había concretado una de sus aspiraciones. “Los vecinos están muy entusiasmados plantando todo tipo de plantas y esperamos expandirnos a las avenidas principales para seguir armonizando. Además, queremos entusiasmar a nuestra gente a que viva este tipo de actividades y la puedan replicar, porque es inyectarnos de lo lindo que tenemos que tener nuestros espacios”.
Fernando Illanes, gerente regional de Corma Biobío y Ñuble, destacó que este tipo de actividades de ayudar a mejorar de una comunidad son prioritarias para el gremio que reúne a forestales y madereras. “Nosotros creemos en los árboles y tenemos todo el conocimiento y disposición para ayudar y trabajar en conjunto con vecinos y comunidad proyectos de este tipo. La donación de estas plantas nativas es para poder mejorar la calidad de vida de los vecinos de este barrio, quienes además valoran la importancia que tiene un árbol que capta CO2 y libera oxígeno. Al plantar árboles, aunque sea en pequeña escala como hoy, muestra un camino para ayudar a mitigar el efecto de cambio climático que sufre actualmente nuestro planeta”.
Coincidente con esta visión, el seremi de Medio Ambiente, Mario Delannays, señaló que “tenemos que hacer un cambio de conciencia, comenzando con los niños y niñas, para que entiendan lo importante que se ha vuelto hoy plantar un árbol. En esta actividad vecinal vemos voluntad, compromiso y que se persigue un valor, como es rescatar espacios para darle más valor natural, a una zona en común”.
Beneficiados
Para la directora del Jardín infantil y sala cuna Achnu, Leticia Calfulén, este tipo de iniciativas es uno de los sellos fundamentales del establecimiento, que se basan en potenciar en nuestros alumnos, una vida saludable y el cuidado del medio ambiente. “Hemos tenido un arduo trabajo para recuperar este espacio que antes era un basural y la idea es seguir colaborando con la arborización de la plaza y así enfrentar el cambio climático”.
Cristian Herrera, vecino de Villa Evangelista y apoderado del jardín, plantó unos árboles junto con su hijo para hermosear el lugar. “Esto significa recuperar un área verde para los niños y lo ideal sería que este tipo de iniciativas se pueda repetir en otros sectores, para que podamos mirar otra cosa, viene la primavera y tener algo verde se hace más agradable para todos”.