Chile ha sido identificado como uno de los países donde se puede producir el H2V más económico del mundo, principal fuente de energía del futuro que hoy a nivel mundial mueve el doble de valores que la industria del cobre.
Una energía limpia, que puede generar desde electricidad hasta ser el combustible de aviones y el transporte terrestre ya es una realidad. ¿Su nombre? Hidrógeno verde (H2V), famosa fuerza que proviene directamente del agua, a través de un proceso llamado electrólisis, y que según varios expertos “puede convertirse en el “nuevo cobre” de nuestro país.
Chile está entre los cinco países que se proyectan como los principales productores de H2V en el mundo, junto a Alemania, China, Australia, los Países Bajos y Arabia Saudita. Nuestra nación ha sido identificada como uno de los países donde se puede producir el H2V más económico del mundo, debido al costo nivelado de su producción basada en energía solar fotovoltaica y eólica en los sitios que poseen el mayor potencial de este tipo de energía, como son Atacama y Patagonia, respectivamente.
En concreto, hace dos semanas se aprobó medioambientalmente, y de forma unánime, el primer proyecto de H2V en nuestro país. Éste consiste en la creación y operación de una planta química en la región de Magallanes. El proyecto permitirá producir anualmente 130 mil litros de combustible carbono neutral, con energía eólica. Y sólo Magallanes podría producir el 13% del H2V que el mundo va a necesitar.
Erwin Plett, docente de postgrado del “Diplomado en Economía del Hidrógeno” de la Universidad de Santiago y nombrado embajador del hidrógeno verde por el Ministro de Energía Juan Carlos Jobet, ha explicado que la industria actual del H2V a nivel mundial mueve el doble de valores que la industria del cobre. “Chile podría producir el triple de la cantidad de hidrógeno generado en todo el mundo hoy, y sería un negocio de mayor magnitud que el PIB chileno actual. La pregunta es: ¿cuánto de ese potencial vamos a aprovechar? Si sólo cosechamos el 10% de ese potencial renovable generaríamos una nueva industria similar en tamaño a la minería actual, pero sustentable en el tiempo”.
Transporte verde
El vicepresidente ejecutivo de Corfo, Pablo Terrazas, ha señalado que esta entidad tiene el desafío de acelerar y adelantar la producción de hidrógeno verde en Chile. “Realizamos un proceso de RFI (Request For Information o solicitud de información) para conocer quiénes serían los actores que estarían interesados, nacionales o extranjeros, en producir hidrógeno en Chile. Esa labor ya la cerramos… Pero no es sólo ser generadores de energía limpia, hay que transformar ciertos procesos productivos de algunas industrias, las que más energía consumen, para que utilicen esta tecnología. Hay un sector que produce mucho que es el sector del transporte”.
Terrazas ha dicho que Corfo ha puesto mucha fuerza en avanzar a la electromovilidad creando un centro, el cual preparará a Chile para recibirla de manera masiva, tanto desde el lado del transporte como de los vehículos particulares. “Es un cambio para el cual el país debe prepararse”.
John Novoa, gerente divisional de Camiones y Buses de Indumotora Hyundai –empresa que posee la mayor flota de camiones de hidrógeno verde del mundo y lidera la transformación de la matriz energética en materia de transporte–, concuerda con Terrazas en que el mercado del transporte deberá trabajar para adaptarse a esta verdadera revolución verde. “Todos los actores involucrados debemos coordinarnos y esforzarnos para que este cambio se lleve a cabo con éxito. Pero ya tenemos algo muy potente a nuestro favor: poder ser un país productor de hidrógeno verde, lo que será clave en la descarbonización del transporte de Chile”.
A nivel mundial, la proyección para el mercado del transporte, es que tanto camiones como autobuses funcionen con H2V en 10 años más y que ya estén transitando por las calles, debido a que el precio está cerca de lograr la paridad con los hidrocarburos.
Según un estudio encargado por Clean Energy Finance Corp, respaldado por el Gobierno de Australia, país que se encuentra entre los desarrolladores de H2V más activos del mundo, con más de una docena de agrupaciones tecnológicas para el combustible, este elemento podría ser comercialmente viable en el transporte para 2030. Para ese año se espera que el costo del hidrógeno verde entregado caiga un 40%, a US$2,70 por kilogramo, debido a la caída de los costos de los electrolizadores y las continuas bajas en los costos de energía solar y eólica.
John Novoa cuenta que en este momento Indumotora Hyundai tiene una flota de 50 camiones de hidrogeno verde funcionando en Suiza, en proceso de ser alquilados a clientes comerciales. Esto la posiciona como líder mundial en desarrollo tecnológico y economía eco friendly en el mercado del transporte. El objetivo es tener 1.600 unidades en funcionamiento para 2025.
“Hyundai es una empresa ícono en el fin de los hidrocarburos. Su experiencia y compromiso con el medio ambiente le permiten ser un símbolo de las industrias que transitan hoy en nuestro país a la electromovilidad en la era de las energías limpias. En Europa, es líder en el uso del hidrógeno verde, lo que seguro seguirá expandiéndose por el mundo”, puntualiza el ejecutivo.