Las tendencias saludables de los últimos años han convertido al cuidado de la salud y del estado físico en una prioridad que traspasa el mundo de los fanáticos de los músculos y deportistas. Hoy, cuidar nuestra salud física y mental es algo clave y realizable para todos, gracias a la variedad de bicicletas que se encuentran en el mercado.
La visibilización de los problemas de salud directamente vinculados a un mal estado físico y de los evidentes beneficios del ejercicio para nuestra salud mental, han permitido situar el entrenamiento como aspecto prioritario para todos y, en esto, a las bicicletas como la mejor forma de pasar tiempo afuera, ejercitarnos y, además, transportarnos.
La gran variedad de bicicletas de paseo, eléctricas, infantiles y para montaña crean un abanico de variedades para todos los gustos. Esto, junto a sus valores que van desde los 160 mil pesos hasta modelos eléctricos que superan el millón de pesos, logran acercar esta actividad física a todos promoviendo así un mejor estado físico, que nos movamos más fácilmente y, que seamos más felices.
Ya sea que simplemente busques un modelo para transportarte y evitar la incomodidad, precios elevados y la espera de los buses, colectivos y metro; quieras realizar ejercicios un poco más avanzados en tu mountain bike o; sólo la quieres para pasear algunas veces, bicicletas hay para todos.
¿Por qué te hace bien?
Primero que todo, porque es práctico. El ejercicio debe ser simple y fácil de hacer constantemente; todo lo relacionado con buscar estacionamientos, tacos y bocinazos, no lo es. Para la actividad que quieras, la verdad es que tomar una bicicleta y salir a andar en ella no te tomará mucho tiempo ni requerirá de gran motivación.
Toda la ciudad puede ser tu pista y, tener una bicicleta, resuelve muchos de esos problemas. Puedes tener una sesión rápida en cualquier momento del día y hora, y beneficiarte también del efecto acumulativo de múltiples entrenamientos, al mismo tiempo que estás literalmente transportándote de un lugar a otro.
Dicen que nunca se olvida cómo andar en bicicleta, así que, ¿qué esperas? Es momento de subirse a un vehículo de dos o tres ruedas y disfrutar de los beneficios para tu cuerpo que trae el ciclismo, y en diferentes ámbitos.
En primer lugar, como ejercicio, es suave para las articulaciones. Cuando te sientas en una bicicleta, pones tu peso sobre un par de huesos de la pelvis llamados tuberosidades isquiáticas, a diferencia de caminar, cuando pones tu peso sobre las piernas. Eso lo hace bueno para cualquier persona con dolor en las articulaciones o rigidez propia de la edad.
Por otro lado, empujar los pedales proporciona un entrenamiento aeróbico. Eso es genial para tu corazón, cerebro y vasos sanguíneos, al igual que cualquier ejercicio de cardio. Además, es bueno para desarrollar músculos, ya que se trabajan los de los glúteos, cuádriceps de los muslos y las pantorrillas, los abdominales, brazos y hombros.
Además, como sabemos, todo ejercicio aeróbico en que vamos sudando constantemente es también muy bueno internamente, porque desencadena la liberación de endorfinas, esas sustancias químicas que literalmente nos hacen más feliz.
Esa sensación de libertad se extiende también al horario. Una salida en bici siempre está “abierto”, incluso si no puedes dormir y decides salir a pasear alrededor de tu calle. Unos 20 minutos al aire libre te darán la sensación de relajo y felicidad que te faltaban para tener un sueño profundo.
Finalmente, y no por eso menos importante, contar con una bicicleta es muy rentable. Puedes comprar incluso la bici más cara o una eléctrica y ocuparla para ir a trabajar y aún así estarías ahorrando comparado con los que gastas en pasajes de metro en un año. ¡Es simple!
[1] https://www.icebike.org/why-ride-a-bike/
https://www.bikeradar.com/features/10-entirely-convincing-reasons-to-buy-a-new-bike/
https://www.health.harvard.edu/staying-healthy/the-top-5-benefits-of-cycling
