Por Vivian Budinich, Gerente Marketing Corporativo y Sostenibilidad Empresas Iansa
Entender que no existe un escenario fijo, un contexto único o una planificación cerrada es una manera, no sólo de enfrentar la sostenibilidad, sino que también, de ser cada vez más sostenibles.
La pandemia −sumada a las demandas sociales a nivel país− nos han demostrado que la capacidad de reconocer nuestro entorno, adaptarnos e innovar es clave para enfrentar los desafíos futuros. Entender que no existe un escenario fijo, un contexto único o una planificación cerrada es una manera, no sólo de enfrentar la sostenibilidad, sino que también, de ser sostenibles.
En Empresas Iansa nos tomamos la innovación como un factor crítico para garantizar nuestro desarrollo. Hoy las tendencias y hábitos del consumidor son cada vez más dinámicos, cambiantes y dependientes de factores que no podemos controlar y que, muchas veces, -como fue el caso de este año- ni siquiera podemos imaginar.
En lo concreto, durante este 2020 lanzamos una serie de productos que buscan responder a nuevas necesidades y desafíos de los consumidores. Una nueva categoría de legumbres, azúcar extrafina, azúcar rubia light y alulosa son algunos de estos ejemplos. Nuevos insumos agrícolas, una nueva planta de sales minerales de nutrición animal, nuevas variedades de pulpa de frutas y vegetales, entre otros ingredientes, fueron las innovaciones a nivel industrial.
Otro foco fundamental es nuestro compromiso con las comunidades y la colaboración con otras instituciones. Es así como promovemos -por ejemplo- el desarrollo agrícola mediante la articulación de asociaciones con instituciones públicas tales como Corfo e Indap o -en otro ámbito- promovemos la educación nutricional y salud para nuestros colaboradores, comunidades y públicos externos, trabajando en conjunto con la carrera de nutrición de la Universidad del Desarrollo. Nuestra proyección es seguir en esta línea y reforzar la articulación de programas para apoyar a nuestras comunidades cercanas, en temas relacionados con la nutrición y la promoción del deporte, entre otros.
Al mismo tiempo, la capacidad de reconocer lo medioambiental como un elemento clave para la sostenibilidad de cualquier negocio y tener la capacidad de “adaptar y adoptar” nuevas maneras de gestionar los impactos de -por ejemplo- en nuestras nueve plantas productivas, es una prioridad para nosotros. En ese sentido, el cuidado del agua, la gestión de la huella de carbono, la promoción de la economía circular y la gestión de residuos son áreas donde la empresa tiene un importante rol y compromiso. Es por ello que nuestro desafío es seguir trabajando en forma efectiva en todas aquellas iniciativas que nos permitan seguir innovando y mitigando nuestro impacto sobre el medioambiente.
Para terminar, creemos que la capacidad de tener una escucha activa, flexibilidad para la adaptación y agilidad para dar rápidas respuestas a las demandas del entorno, serán factores cada vez más cruciales a la hora de generar lazos y reforzar las confianzas con nuestras personas y las comunidades en un año golpeado por la pandemia.
[…] […]