El curso 100% digital permitirá a 40 alumnos hacer crecer sus negocios, reinventarse o aprender un nuevo oficio.
Se trata de una iniciativa impulsada por Claro Chile y Fundación Emplea, que cuenta con el patrocinio del Ministerio de Medio Ambiente.
Jessica y Leandro representan a un grupo de recicladores base y emprendedores que necesitan pasar del reciclaje tradicional del cartón, botellas y chatarra, a uno especializado en residuos eléctricos y electrónicos como teléfonos celulares o impresoras, para reinventarse, acceder a un nuevo trabajo o reemprender.
Es así como llegaron al curso de reciclaje electrónico que coordina la Fundación Emplea con el apoyo de Claro Chile y el patrocinio del Ministerio del Medio Ambiente, el que les permitirá profesionalizarse y generar nuevos ingresos de cara a la futura implementación de la ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP).
La capacitación, a la que ya se inscribieron 20 hombres y 20 mujeres de doce comunas de Santiago, se realizará en forma 100% remota, y entregará contenidos sobre reciclaje, aparatos eléctricos y electrónicos, además de habilidades de liderazgo y negociación, entre otras materias. El curso considera la entrega de un certificado del Servicio Nacional de Capacitación (SENCE) que avala la realización de la formación y los conocimientos adquiridos.
Carolina Schimdt, ministra del Medio Ambiente, señaló que “la economía circular es la forma de avanzar al desarrollo sustentable y la profesionalización de los recicladores de base es fundamental para cumplirlo, promoviendo una reactivación verde. Por eso es tan relevante el proceso de capacitación en el manejo de residuos electrónicos que están comenzando recicladores de base, responsables del 60% de lo que reciclamos en el país y ahora enfrentan el desafío de aprender sobre el manejo de la chatarra electrónica, que cada día tiene mayor relevancia considerando que Chile lidera en América Latina la generación de estos residuos”.
Por su parte, Leonardo Cerda, gerente de Asuntos Corporativos de Claro Chile, explicó que “en Claro estamos convencidos que el compromiso con el medioambiente es posible si sumamos a más personas con educación y conocimientos especializados. Por ello, junto a la Fundación Emplea, apoyamos este curso que les permitirá estar mejor preparados para cuando empiece a regir la Ley REP”.
Ricardo Délano, director de Fundación Emplea, agregó que “creemos firmemente en el potencial que tienen las personas para generar cambios a través de su trabajo, como resultado del fortalecimiento transversal de sus competencias. Impulsar la formación de estos talentos es fundamental hoy en día para el desarrollo de una economía circular que proteja el medioambiente”.
Jessica Quintanilla, una de las estudiantes, comenta que “desde hace tiempo que me mueve el tema del reciclaje, tengo una comunidad donde enseñamos a la gente a reciclar y sobre economía circular, pero no hay muchas opciones para educarse en el tema, así que soy autodidacta. Siempre sentí que me faltaba aprender sobre reciclaje de aparatos electrónicos y teléfonos, por eso cuando supe, me inscribí de inmediato. Hoy estoy sin trabajo y esta podría ser una oportunidad para un eventual trabajo o para emprender o iniciar mi propio camino como recicladora de base”.
Por su parte, Leandro Fuentes, quien también forma parte de los inscritos, dijo que “desde hace años trabajo como reciclador de otro tipo de materiales, tengo una pyme de reparto de frutas y verduras y mucho de lo que sobra lo regalo o lo reciclo. Pero quería sumar conocimientos en reciclaje de tecnología, porque, si bien todavía no sé bien cómo, me gustaría trabajar en este tipo de actividad”.
A nivel global, según el Global E Waste Monitor 2020, los residuos electrónicos han crecido en un 21% en 5 años, alcanzando una cifra de 53 millones de toneladas métricas y, de ellas, solo el 17% fue reciclada correctamente. En Chile, de acuerdo al estudio realizado por el Ministerio del Medio Ambiente y Fundación Chile, solo el 3,4% de los residuos electrónicos son tratados y en 2017 cada habitante del país generó 9,6 kilos de chatarra electrónica al año. Se estima que en 2027 la cantidad de chatarra electrónica será de 14 kilos por habitante, por lo que todavía hay una gran tarea por avanzar.
