En un contexto de compras masivas en plataformas online por los cyber days en Chile, la marca de ropa outdoor lanzó una campaña distinta donde apuesta por informar a las personas y la responsabilidad ambiental y social.
“Nuestra huella“ es el nombre de la nueva campaña de Patagonia y que forma parte de una invitación especial a conocer el impacto y los cambios que está realizando la marca outdoor para cuidar el medio ambiente. En medio de una vorágine de ofertas de distintas empresas que forman parte del cybermonday, Patagonia se distingue y realiza un llamado a informarse de manera consciente sobre el origen de las prendas y su cadena de suministro, apostando a la responsabilidad social y ambiental y respondiendo así a su misión de salvar el planeta Tierra.
Y es que Patagonia entiende que es parte de una de las industrias más contaminantes del mundo y que actualmente, según datos de la ONU, aporta con el 8% de los gases de efecto invernadero producto del uso de energía proveniente de plantas termoeléctricas que funcionan en base a carbón. Esta cifra, es incluso superior a la contaminación de vuelos internacionales y transporte marítimo combinado, por lo que la marca con sede en California no solo trabaja por reducir su impacto, sino por hacer verdaderos cambios en beneficio del medio ambiente y cumplir la gran meta de convertirse en carbono neutral para el 2025.
Macarena Sánchez, Directora de Marketing de Patagonia Chile se refirió a este tema y destacó que “la invitación es a pensar distinto el consumo, con una mirada responsable desde lo social y ambiental porque está en las manos de cada persona cambiar el futuro y la forma de hacer las cosas. Por eso buscamos inspirar a través de nuestros programas y campañas demostrando que podemos trabajar no solo en reducir nuestro impacto, sino que en convertirlo en algo positivo. Ese es nuestro desafío y nuestra misión”.
Patagonia ha asumido esta tremenda tarea de cuidar el medio ambiente desde su creación en 1973 y hoy ya cuenta con grandes pasos como el uso de algodón orgánico desde 1996, 68% de la línea de productos usa materiales reciclados y 66 mil trabajadores son parte del programa de Comercio Justo. Pero aún hay mucho trabajo por hacer, por eso Patagonia está transformando su manera de hacer las cosas y cambiar la mirada de la industria y de los consumidores a través de transparentar cómo se hace la ropa, haciéndola de gran calidad para que perdure en el tiempo, usando materiales reciclados, promoviendo condiciones laborales justas y seguras para las personas y cultivando alimentos y fibras de forma menos invasiva y más natural. Estas cinco líneas que trabajan la responsabilidad ambiental y social se traducen en programas que hoy ya cuentan con un gran avance.
¿Por qué Fair Trade o Comercio Justo?
No se puede ser responsable con el medio ambiente dejando de lado a las personas, por eso Patagonia vela por la justicia social no solo a través de su programa de donativos para proyectos socioambientales en todo el mundo, sino que también a través de su programa Fair Trade donde promociona condiciones laborales y de seguridad justas para las personas que son parte de su línea de producción. Esta labor hoy se traduce en que el 83% de la línea cuenta con certificación Fair Trade o Comercio Justo, el mayor porcentaje que cualquier otra marca de ropa. Este trabajo de empoderamiento a la fecha ha permitido que 66 mil personas hayan logrado decidir cómo mejorar su calidad de vida mediante la prima que Patagonia paga por cada prenda que se confecciona en las fábricas certificadas.
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¿Por qué reciclar?
Una de las grandes apuestas de Patagonia ha sido innovar en materia de diseño textil convirtiéndose en pionera dentro de la industria del vestuario luego que 68% de la tela de esta temporada este hecha con materiales reciclados en un contexto en que menos del 10% de las fibras que se producen en el mundo se hacen de esta forma. Así, este año, dejó de emitir 20 mil toneladas de CO2.
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¿Por qué apostar por lo Orgánico Regenerativo?
El uso de la tierra para fines agrícolas, silvícolas y de otra índole “supone el 23% de las emisiones antropógenas de gases de efecto invernadero” en la actualidad, degradando los suelos y disminuyendo su capacidad de producir recursos. En este contexto, los métodos orgánicos regenerativos se convierten en una alternativa clave ya que al ser menos invasivos y reducir la utilización de químicos, entre otros, mejoran la salud de los suelos y ayudan a devolver el carbono del mismo, logrando potencial para cambiar la forma en que se cultivan alimentos y fibras, así como de restaurar la salud de la tierra y el clima.
Si bien el concepto “orgánico regenerativo” se incorporó en Patagonia hace más de 20 años con el uso de algodón orgánico, actualmente el nuevo paso es mucho mayor y se relaciona con la inversión en 550 granjas que producen esta fibra para apoyar su proceso de Certificación Orgánica Regenerativa, en un contexto en que menos del 1% del algodón que se cultiva en el mundo es orgánico.
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