Por Andrea Rudnick, Directora en Empresas Portuaria Antofagasta
Hemos avanzado gradualmente hacia la equidad de género en Chile. Según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, tanto en Chile, Colombia, México y Perú se han concretado importantes avances en la participación de la mujer en la toma de decisiones, en años de escolaridad, en el ingreso de la mujer al mercado laboral y la protección social para las familias.
Asimismo, se nota un crecimiento en la participación de la mujer en el sector laboral, donde la tasa de participación en la fuerza laboral de las mujeres en edad productiva (15 a 64 años) en Chile pasó de 37.4% en 1996 a 55.7% en 2014.
En lo que respecta a la participación de mujeres por industria, las actividades portuarias se incluyen en el grupo de Transportes y Telecomunicaciones, alcanzando un 24,1% de acuerdo con el “Reporte de indicadores de género en empresas en Chile 2019” desarrollado por el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género junto al Ministerio de Hacienda. Cabe destacar que el Puerto de Antofagasta reportó para el 2019 un 38,5 % de dotación femenina superando a la cifra del sector, lo que demuestra su compromiso en esta materia.
Empresa Portuaria Antofagasta ha reforzado la equidad de género mediante la capacitación de talentos internos como “Agentes de Igualdad” impartido por el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género, la participación en el “Diplomado de especialización en género y trabajo” realizado en la Universidad Alberto Hurtado y financiado por Naciones Unidas, y en la participación como empresa en la Iniciativa de Paridad de Género Chile, para así avanzar hacia la certificación de la Norma NCh 3262 y la implementación de un Sistema de Gestión de Igualdad de Género y Conciliación. A su vez, la alta dirección de la empresa cuenta con un 33,3% de presencia femenina en su directorio.
Aún nos quedan enormes desafíos para disminuir la disparidad de género que existe en nuestro país, en cuanto a derechos y oportunidades. Este es un desafío de largo plazo que requiere cambios culturales, ya que todos tenemos sesgo de género. No obstante, como puerto público estamos comprometidos a continuar implementando medidas concretas de equidad de género en el corto plazo, para mejorar nuestros indicadores y sensibilizar a nuestros trabajadores y trabajadoras, contribuyendo a la transformación de nuestra sociedad en su conjunto.