Por Raju Vegesna, Jefe Evangelista de Zoho
Las micro, pequeñas y medianas empresas (conocidas como MiPyMes) representan al 99,5% del tejido empresarial de América Latina, en el cual generan el 61,2% del empleo formal, de acuerdo con datos de la CEPAL.
Tan solo el 29% de los puestos de trabajo en la región depende de la actividad de organizaciones de hasta 5 empleos o microempresas.
A pesar de su enorme fuerza en generación de empleos, las MiPyMes latinoamericanas apenas concentran el 24,6% de la producción total de la región, según el mismo estudio. Estas organizaciones enfrentan retos asociados a las economías emergentes, que limitan su crecimiento, profesionalización y el hallazgo de mercados de mayor productividad y valor agregado. Estos inconvenientes incluyen las fluctuaciones económicas, los niveles bajos de especialización y el acceso tardío a las tecnologías.
Por esta razón, existen múltiples acciones que se pueden emprender, entre ellas la utilización de tecnologías en la nube que, además de ofrecer un acceso fácil e inmediato a las versiones más recientes de software, ayudan a que las organizaciones controlen sus inversiones en tecnología. En este caso, las empresas pagan por el software como si se tratara de un servicio público, en el cual pagan mensualmente por la cantidad de usuarios y por el tiempo que lo utilizaron.
Las características generales de India y Latinoamérica son similares, de ahí que las soluciones desarrolladas por Zoho encuentren un nicho de crecimiento interesante en la región. La intención de la compañía es desarrollar suites y aplicaciones en la nube que entiendan las necesidades de las empresas y que crezcan con ellas, para reducir la brecha educacional sobre las tecnologías.
Cabe señalar que en Zoho desarrollamos nuestros productos para que se adapten a las necesidades y acompañen a las empresas en el momento que viven. Por ejemplo, recientemente presentamos Zoho Bigin, un CRM enfocado en apoyar a las MiPyMes en hacer su tránsito a las nuevas tecnologías. Este producto permite gestionar adecuadamente a los clientes, a través de embudos de conversión que comprenden desde la captura de datos de los clientes potenciales hasta su compra y el seguimiento futuro.
La crisis originada por la pandemia está obligando a las empresas a digitalizarse. Sin embargo, el proceso de educación de las herramientas no es tan acelerado. Nuestra propuesta es entregar tecnologías a un precio justo y que se adapten a la empresa. Queremos cambiar el esquema donde son las MiPyMes quienes deben adaptarse a la tecnología”.