Por Camilo Carrasco, Director Ejecutivo Fundación AcercaRedes
Hace pocos días salieron a la luz los resultados del estudio “Brecha en el uso de internet: Desigualdad Digital en el 2020” de Fundación País Digital, el cual arrojó que el 80% de los chilenos utiliza internet.
Este avance sin duda es valioso si se compara con los resultados del año 2013, pero sigue siendo insuficiente, ya que un gran número de personas sigue sin acceso a internet, quedando en una situación de total desventaja.
Al analizar los factores que condicionan este fenómeno, nos preocupa especialmente que sectores urbanos registren un 81% de usuarios de internet, mientras que los rurales solo un 57%.
Hemos sido testigos de esta brecha en las últimas semanas, pues como miembros del programa Santiago No es Chile, hemos colaborado con ODEPA para llegar con el Ingreso Familiar de Emergencia a comunidades rurales sin acceso a internet, de manera que accedan a este beneficio que legítimamente les corresponde. Desde nuestro rol articulador para el desarrollo local, aceptamos el desafío y junto a ARAUCO hemos vinculado a una red de instituciones, apoyando a la fecha a más de 450 familias.
En días en que la postergación social se manifiesta con fuerza, ¿cómo avanzar en la recién anunciada Política Nacional de Desarrollo Rural sin conectividad? Es momento de enfrentar la brecha digital para entregar acceso a internet a todas las comunidades, independiente de su nivel socioeconómico, edad o lugar en que viven. Si hay algo que ha quedado demostrado durante este período, es que el acceso a la tecnología es indispensable no solo para lograr los objetivos del desarrollo integral y el bienestar social, sino también para enfrentar situaciones de crisis como la que estamos viviendo.