Se trata de Cánulas Nasales de Alto Flujo que proporcionan al paciente oxígeno humidificado, lo que permitirá tratar enfermos críticos con coronavirus evitando que deban pasar a la fase de ventilación mecánica con sedación.
Durante la madrugada de hoy, el Fondo Privado de Emergencia para la Salud de Chile, levantado por la CPC, concretó la adquisición de 400 unidades de Cánulas Nasales de Alto Flujo (humidificador Hifent de Respircare), que serían traídas desde China a nuestro país la próxima semana y puestas a disposición de la autoridad sanitaria, para apoyar los tratamientos de pacientes críticos con Covid 19. La compra fue realizada conforme a los requerimientos y especificaciones técnicas de expertos de los ministerios de Salud y Ciencia de nuestro país.
El uso de este tipo de cánulas es una técnica que ha sido exitosa en otros países del mundo y corroborada por especialistas de los Hospitales de la Universidad Católica y la Universidad de Chile, demostrando que para muchos pacientes con coronavirus puede ser una mejor solución que el ventilador mecánico invasivo. A través de este sistema, el equipo proporciona al enfermo oxígeno humidificado a 37 grados a través de una cánula nasal, permitiendo que el paciente se mantenga despierto y solo requiera del apoyo de una enfermera. Permite evitar que hasta un 50% de los pacientes críticos pase a la fase de ventilación mecánica con sedación o coma inducido.
El presidente de la CPC, Juan Sutil, señaló que “los empresarios estamos comprometidos a ayudar con total prontitud a solucionar las urgencias que estamos enfrentando en materia de salud, en coordinación con la autoridad sanitaria. Por eso, concretamos hoy este nuevo aporte que permitirá manejar de manera más efectiva el aumento de casos críticos, reduciendo el número de fallecidos, en relación a lo que pudiera ocurrir sin esta alternativa”.
Este nuevo aporte de las empresas y empresarios de Chile alcanza un valor cercano a $ 1.230 millones y se suma a las ya realizadas donaciones de 515 ventiladores, 200 mil kits de reactivos PCR, 700 mil test rápidos de diagnóstico, entre otros elementos de prevención y protección.
A través del fondo privado de emergencia que ya supera los $ 94.000 millones, el mundo empresarial está apoyando también a más de 50 fundaciones que dan soporte directo a un número superior a 300 mil personas de alta vulnerabilidad; se implementó un programa especial dirigido a proteger y minimizar el impacto de la crisis sanitaria en los adultos mayores que más lo necesitan; se echó a andar el Fondo de Adopción Tecnológica, que apoya soluciones innovadoras para dispositivos médicos, diagnósticos, tratamientos y vacunas. En todas estas acciones, el sector privado ha trabajado de manera coordinada con la autoridad sanitaria y la sociedad civil, aportando -más allá de capital- capacidad de gestión, logística, infraestructura y redes, entre otros activos propios del mundo empresarial.
Más allá de los temas de salud, hoy las empresas con sus trabajadores y empresarios, están desarrollando la campaña solidaria SiEmpre por Chile-Cajas de Alimentos, cuyo objetivo es producir y entregar cajas con alimentos básicos para al menos 125.000 familias del segmento más vulnerable, en un esfuerzo coordinado con el Ministerio de Desarrollo Social y la sociedad civil.