En ciudades cada vez más contaminadas y saturadas por vehículos pesados, la inclinación es a buscar nuevos métodos para transportarse de manera eficiente y ecológica.
Según datos del Ministerio de Energía, la presencia de vehículos eléctricos livianos en el mundo viene incrementándose, entre el 2015 y 2017, a una tasa anual del 60%, pasando de 1,2 millones aproximadamente en 2015 a 3,1 millones en 2017.
Y Chile no es la excepción. Así indica Paola Tapia, ex Ministra de Transporte y Telecomunicaciones y actual Directora de Derecho de la Universidad Central: “La electromovilidad en el país ha evolucionado positivamente, y con especial énfasis desde 2017, cuando se genera la primera Estrategia al respecto, se incorporan los primeros buses al transporte público y se genera el marco normativo necesario para su implementación”.
En ese escenario, una de las formas de movilizarse por la ciudad que ha presentado un aumento relevante son las bicicletas eléctricas. “Desde hace un tiempo, el número de personas que usan bicicleta no sólo para hacer deporte, sino para desplazarse en su rutina diaria ha crecido exponencialmente y las alternativas eléctricas se están masificando de manera importante, especialmente en el último año”, señala Juan Ignacio Guldman, gerente de operaciones de Völmark Chile que actualmente ofrece todo tipo de bicicletas de este tipo: urbanas, plegables, para montaña y también para reparto de mercaderías. Guldman sostiene que al comienzo existían “prejuicios respecto a su dificultad de uso, seguridad y precios elevados y eso ha ido cambiando, especialmente de la mano de nuevas generaciones”.
Esta postura es compartida por Cata Droguett, speaker y conductora del espacio televisivo “Chile Sustentable”. Ella señala que “tomar acción para revertir la crisis climática que hoy afecta al planeta es urgente. Todos podemos hacer algo, por ejemplo cambiando nuestros habitos a la hora de movilizarnos, la bicicleta es una maravillosa alternativa que tiene un impacto positivo no solo en el medio ambiente sino que también en la persona que la usa ”.
En ese sentido, Tapia refuerza que el uso de la bicicleta, en cualquiera de sus modalidades, es siempre positivo para la movilidad sustentable. “Las bicicletas eléctricas por tanto aportan a la reducción de emisiones de gases contaminantes y requieren, al igual que todas, de infraestructura segura y de calidad, siendo esencial el aumento de kilómetros de ciclovías, mejorar su continuidad y conexión”.
Pero no sólo las bicicletas están marcando los movimientos de la industria. Otro tema que ha sorprendido es cómo las empresas están incorporando estas prácticas dentro de sus procesos: “Los carros y buses eléctricos para prestaciones privadas, como rutas turísticas o traslados al interior de una faena, se han incrementado con fuerza en los últimos 12 meses, dando cuenta que no sólo las personas, sino también las compañías están adhiriendo a estas tendencias”, asegura el representante de Völmark.
En cuanto a los desafíos, la
conductora del programa Chile Sustentable cree que generar mayor comunicación
en torno a estos temas para que las personas realicen cambios de conducta
positivos es clave. A nivel de políticas publicas, en tanto, Paola Tapia afirma
que “para seguir avanzando se requiere masificar el uso de la tecnología electrica, siendo esencial
contar con beneficios tributarios que favorezcan la compra. Se requiere normas
que promuevan esta opción, como sería contar con zonas en la ciudad a las que sólo puedan
acceder estos vehiculos”. En el caso de las bicicletas eléctricas, puntualiza
que además de los aspectos tributarios “se debe generar más y mejor integración
con el transporte público”.
Compromisos 2020 del acuerdo público privado para impulsar la electromovilidad
Esta mes se concretó la tercera versión del compromiso público–privado con 53 empresas e instituciones, que apunta al desarrollo de acciones y proyectos que en el corto plazo contribuyan a difundir en Chile las ventajas de la movilidad eléctrica, y promover este cambio en el transporte nacional.
- Aumentar en 5 veces más la cantidad de cargadores de vehículos eléctricos.
- Ampliar la oferta de vehículos eléctricos con más de 300 equipos entre vehículos livianos, camiones, buses y vans.
- Disponer dos nuevos instrumentos de financiamiento específico para la inversión en electromovilidad
- Desarrollar la segunda Feria Internacional de electromovilidad, junto a seminarios a nivel nacional.
- Formación de capital humano, gracias a la ejecución de un nuevo diplomado, capacitación de técnicos y desarrollo de un proyecto de competencias.
Fuente: Ministerio de Energía