Mientras la temporada de huracanes de este año afecta a numerosas personas y comunidades, salen a la luz nuevas estimaciones sobre el aumento del nivel del mar y sus impactos.
Los modelos de predicción climática han avanzado enormemente en los últimos 20 años, así que debemos tomar nota de sus hallazgos.
Si el incremento de la temperatura global alcanza 5 °C por encima de los niveles preindustriales, existe una probabilidad de uno en 20 de que el aumento del nivel medio del mar supere los dos metros, reveló recientemente un equipo de científicos en el artículo Contribuciones de las capas de hielo al futuro aumento del nivel del mar a partir del juicio estructurado de expertos, publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences de los Estados Unidos.
Un aumento de temperatura de 5 °C es posible si las emisiones de gases de efecto invernadero siguen creciendo sin control.
“Esto es más del doble del valor superior presentado por el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático en el Quinto Informe de Evaluación [2013]”, señala el estudio.
Tal aumento en los próximos 80 años podría desencadenar el desplazamiento gradual de millones de personas en todo el mundo y robarse un área de tierra tres veces más grande que el estadp de Texas (Estados Unidos).
Gran parte de las pérdidas de tierras se producirían en importantes zonas de cultivo, como el delta del Nilo. Las comunidades costeras, los puertos y los países bajos como Bangladesh se verían muy afectados. Grandes cantidades de pequeñas islas desaparecerían. Grandes ciudades como Londres, Nueva York y Shanghái terminarían, al menos parcialmente, bajo el agua.
Este escenario es aún más sombrío si las predicciones van más allá de 2100, cuando el aumento proyectado llega a los 7,5 metros.
El informe Un nuevo clima para la paz: tomando medidas sobre los riesgos climáticos y de fragilidad, comisionado por miembros del grupo de naciones del G7, describe siete riesgos de “fragilidad climática” que representan serias amenazas para la estabilidad global en las próximas décadas.
Uno de los riesgos identificados es el aumento del nivel del mar. “El aumento del nivel del mar es una amenaza para la viabilidad económica y física de las zonas bajas, ya que los recursos terrestres y costeros se pierden gradualmente. Esto puede conducir al malestar social, el desplazamiento y la migración, así como a desacuerdos sobre las fronteras marítimas y los recursos oceánicos”, indica el reporte.
El secretario general de la ONU, António Guterres, advirtió recientemente: “La pérdida de hielo en Groenlandia y la Antártida se está acelerando, lo que significa que los niveles del mar subirán un metro para 2100 si no hacemos nada para evitarlo”.
Una advertencia que debemos oír
“El cambio climático es el principal multiplicador de amenazas”, dice Niklas Hagelberg, especialista en cambio climático del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente.
“Los huracanes no son nuevos, pero el aumento en la probabilidad de tormentas peligrosas relacionadas con la subida del nivel del mar sí lo es. Este estudio es una advertencia para los actores que participan en la elaboración de planes de contingencia y nos recuerda una vez más que debemos tomar medidas urgentes para reducir el calentamiento global”, añadió Hagelberg.
“40% de la población mundial vive a menos de 100 kilómetros de la costa. Necesitamos hacer todo lo posible para reducir las probabilidades de este escenario y evitar que lleguemos a un punto sin retorno, dode no podremos evitar un cambio climático descontrolado”, agregó Hagelberg.
Actualmente, más de 6 millones de personas viven en zonas costeras vulnerables al aumento del nivel del mar. En un escenario de calentamiento global de 2 °C, 10 millones más se verán afectadas, según el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático.
Adaptarnos a un clima cambiante
A través de su Unidad Conjunta con la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), ONU Medio Ambiente envía a expertos en evaluación de desastres a áreas afectadas por emergencias relacionadas con el clima. Este fue el caso en 2017, después de que el huracán María azotara a Dominica y Puerto Rico, así como en abril de 2019, después de que los ciclones Idai y Kenneth golpearan a Mozambique.
En colaboración con la Oficina de las Naciones Unidas para Servicios de Proyectos (UNOPS), y con financiación del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF), ONU Medio Ambiente apoyó al Gobierno de Tanzania a construir extensos muros de contención a lo largo de la costa del país, incluyendo más de 2.400 metros de estructuras de defensa. El proyecto, que se completó en junio de 2018, fue parte de una iniciativa más amplia de ONU Medio Ambiente para desarrollar resiliencia climática a través de la restauración de ecosistemas naturales.
ONU Medio Ambiente también trabaja con socios para destacar asuntos científicos de preocupación emergente, por ejemplo, en su informe de Fronteras.
La crisis climática está llamando la atención de los medios y políticos del mundo. Varios países han declarado emergencias climáticas y se reportan declaraciones de emergencia climática en varios cientos de jurisdicciones y gobiernos locales que representan a más de 100 millones de ciudadanos.
Diecinueve países y 32 ciudades se han unido a la Carbon Neutrality Coalition, con compromisos concretos y ambiciosos para lograr los objetivos del Acuerdo de París. Esto significa que aspiran a ser carbono neutrales para 2050. Grandes empresas y docenas de marcas reconocidas del mundo de la moda han hecho compromisos similares.