Por Gonzalo Hernández, Director Comercial de Sodexo Beneficios e Incentivos
El nivel de satisfacción en el trabajo es uno de los factores más importantes al medir la calidad de vida en general, sobre todo si consideramos que de acuerdo a cifras entregadas por la OCDE, en Chile se trabaja en promedio 1.988 horas al año.
Por esta razón, uno de los aspectos fundamentales al momento de tomar la decisión de quedarse o no en una empresa y que favorece a la satisfacción de los colaboradores, tiene relación con los beneficios que se les entrega.
Sin embargo, los tiempos han cambiado y las empresas deben adecuarse a las nuevas demandas y necesidades de una fuerza laboral exigente, lo que ha llevado a muchas empresas a replantear su estrategia de beneficios y a hacerse preguntas como ¿cuáles son las principales preocupaciones de los empleados?, ¿cómo hay que comunicar la estrategia al interior de la organización? y ¿dónde debe estar el foco?
Hoy, una de las principales preocupaciones de los trabajadores es la estabilidad económica, tanto personal como familiar. Por lo mismo, es importante entender cómo ayudarlos en este ámbito. En ese sentido, dentro de los beneficios que apuntan a la economía de los empleados, están la remuneración y los beneficios que liberan la carga financiera, los cuales son los más valorados dentro de las organizaciones. Por esto, entregar ayuda como el pago de sala cuna, beneficios de alimentación y de transporte, son esenciales para liberar a los colaboradores de ciertas cargas económicas.
Por otra parte, las organizaciones cuentan con una fuerza laboral multigeneracional, por lo que existen preocupaciones y prioridades diferentes, según el rango de edad que los empleados se encuentren. Por ejemplo, tener los recursos y tiempo para hacerse cargo de su padres, es más importante para las personas que están entre los 40-50 años, pero ser capaz de costear una atención médica durante la jubilación es prioridad para mayores de 50 años. Esto demuestra que una estrategia de beneficios focalizada, que ayude a los empleados se traducirá en mayor tranquilidad, mejor calidad vida y clima laboral, y por ende, mejora la productividad de la compañía.
Las empresas tienen un rol clave, saber cómo comunicar un pool de beneficios personalizado y enfocado en las prioridades de los empleados. El problema no está en la falta de beneficios, sino en cómo son transmitidos, ya que muchas veces los colaboradores no están al tanto de ellos. Para esto, es necesario alinear una estrategia comunicacional, que a largo plazo impacta positivamente en la calidad laboral y en los resultados de la empresa.