En línea con el plan estratégico de Sustentabilidad de la viña, junto con sumarse a los esfuerzos a nivel nacional para enfrentar la problemática de generación y envío indiscriminado de residuos a los rellenos sanitarios, la principal instalación de la compañía se sumó a las 45 empresas que se comprometieron a dejar de enviar residuos a dichos rellenos en un plazo de dos años.
De acuerdo al Banco Mundial, los deshechos generados en el planeta ascienden a 2.010 millones de toneladas y esta cifra se disparará hasta llegar a los 3.400 millones de toneladas en el año 2050. Es decir, que en poco más de tres décadas generaremos casi un 70% más de basura. En Chile, somos los líderes regionales en generación de basura, con 1.15 kilos diarios por persona.
Estas cifras constituyen una crisis socio ambiental a nivel mundial que ha tomado importancia en el último tiempo, llevando a varios gobiernos y diferentes organizaciones a tomar medidas para enfrentar y abordar la contaminación generada por nuestros hábitos de consumo.
Si bien en Chile se han impulsado ciertas normativas como la prohibición de bolsas plásticas y la ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP), existen tramos del ciclo productivo que no cuentan con incentivos o normas para disminuir la generación de residuos, como por ejemplo en las plantas productivas in situ, previo a la comercialización del producto.
Ante dicha situación, en 2017 fue constituido el Acuerdo de Producción Limpia (APL) “Cero Residuos” entre un grupo de empresas, articuladas por ACCIÓN Empresas, la Agencia de Cambio Climático y Sustentabilidad y el Ministerio del Medio Ambiente, para disminuir a cero el envío de residuos al relleno sanitario de sus fábricas y oficinas.
Es por esto que en línea con el plan estratégico de Sustentabilidad de Santa Rita, que establece dentro de sus prioridades el cuidado del medio ambiente y como una de sus estrategias clave el impulso de una política de mínimo desecho, junto con sumarse a los esfuerzos a nivel nacional para enfrentar la problemática de generación y envío indiscriminado de residuos a los rellenos sanitarios, la principal instalación de la compañía —Buin— se sumó a las 45 empresas que se comprometieron a dejar de enviar residuos a dichos rellenos en un plazo de dos años. Lo anterior mediante la reducción de los volúmenes de residuos sólidos que son eliminados, mediante la introducción de prácticas de economía circular, de modo de evitar su generación o aumentar su valorización y recuperación.
“Al cierre del 2017, el 93% de los residuos a nivel global de la compañía fueron reciclados y reutilizados, los cuales están constituido mayormente por los restos de poda de los campos -53%-, orujo y escobajo de cada vendimia -38%-. Sin considerar ambos residuos orgánicos, reciclamos y reutilizamos el 61%, constituido mayormente por el vidrio, plástico y cartón recuperado de nuestras plantas de embotellado y bodegas. A partir del mismo año, se comenzó con un proyecto para identificar brechas en la gestión de residuos, identificándose como principales desafíos aumentar la recuperación de residuos a nivel industrial, abordar los residuos que no estaban siendo valorizados e involucrar a los colaboradores en el cambio cultural requerido para migrar hacia una economía circular en la organización”, comentó Elena Carretero, Gerente de Asuntos Corporativos y Sustentabilidad de Viña Santa Rita.
Agregó que, con dicho diagnóstico, desde 2018 Viña Santa Rita implementó el proyecto de sustentabilidad interna “3R”, cuyo objetivo es concientizar a los colaboradores sobre la importancia y responsabilidad propia en la generación de residuos e involucrarlos en nuevas políticas y acciones. También se han impulsado medidas en conjuntos con otras áreas de la compañía para eliminar, sustituir y reducir insumos desechables de un solo uso, así como disminuir la generación y maximizar la recuperación de los residuos que se enviaban al vertedero. Algunas de las medidas han sido el retiro de los basureros de los escritorios y la instalación de puntos limpios en las oficinas, plantas y bodegas, la entrega de un Mug y bolsa reutilizable, integrar ideas de los colaboradores a través de las olimpiadas de sustentabilidad, concursos, videos de concientización, charlas de expertos, capacitaciones, entre otros.
El proyecto fue ganador en la edición 2019 del premio “Innova Claro” en su categoría de Sustentabilidad, reconociendo de esta forma la dirección tomada a nivel compañía en la gestión de residuos.
Otra línea de trabajo que Santa Rita ha impulsado en economía circular, es la valorización del orujo de uva a través de un proyecto I+D cofinanciado por Corfo y desarrollado en conjunto con Fraunhofer Chile Research, cuyo objetivo fue valorizar el potencial del perfil de polifenólico presente en el orujo proveniente de las variedades de uva que procesamos y evaluar su uso como sub producto en la industria alimentaria humana y animal. La primera etapa de caracterización culminó el 2018 y nos encontramos analizando la factibilidad de seguir avanzando en una segunda etapa para evaluar el potencial en el mercado alimentario y el escalamiento de la extracción de polifenoles.