Por Catalina Araya Lira, directora de Educación en Fundación País Digital
Hoy buscamos fomentar una cultura digital en nuestro país, lo que conlleva hacerse cargo de un sinfín de desafíos que permean distintos sectores de nuestra sociedad y en distintos niveles. Algo que nos preocupa especialmente desde el área de Educación de País Digital, donde buscamos promover la cultura escolar en la era digital.
La tecnología forma parte de nuestra vida diaria y nos ofrece infinitas formas de colaboración, expresión y de acceso al conocimiento pero, a su vez, nos plantea desafíos éticos porque puede usarse de manera inadecuada para compartir información privada, hostigar e, incluso, abusar sexualmente. En el día del ciberacoso esto cobra especial sentido.
Según nuestras mediciones, un 73% de los estudiantes de 12 años tiene un Smartphone y el 88,8% de los menores de 18 años utiliza Internet al menos una vez al día. Esto nos muestra que los niños, niñas y jóvenes de Chile no son ajenos a la era digital, ni a sus bondades, pero tampoco a los riesgos a los que se exponen.
Un buen uso de Internet exige un acompañamiento a los niños y niñas, por esto, toda la comunidad educativa debe involucrarse en la enseñanza de esta herramienta. Padres, profesores y directivos debemos acercarnos a la tecnología para mitigar daños.
Dejar a los escolares solos en esto es una gran irresponsabilidad. Por eso, debemos ir más allá de educar en la parte técnica, cómo usar los dispositivos como computadores, tablets o pizarras interactivas, sino que el foco debe estar en el autocuidado y el uso responsable de estas nuevas tecnologías.
Así como enseñamos a nuestros hijos a cruzar la calle, tomando todas las precauciones que esto conlleva, debemos hacer lo mismo al cruzar la barrera hacia el mundo digital. Los “nativos digitales” no existen, existen niños que nacieron en un contexto marcado por el desarrollo tecnológico.
De esta forma, podremos prevenir situaciones que pueden poner en riesgo la seguridad e integridad de nuestros niños.
Hoy invito a toda la comunidad escolar a acercarse a la tecnología y a Internet desde la visión que nos plantea la UNESCO “Internet y las nuevas TIC deben ser formas de compromiso positivo, de paz, de promoción del respeto de los derechos humanos y la dignidad, que faciliten el diálogo y el entendimiento mutuo”.