Según las cifras entregadas, entre el 6 de diciembre de 2018 y el 6 de enero de 2019, el número de personas quemadas por fuegos artificiales aumentó en un 33% respecto al año anterior.
En el marco del cierre de la Campaña Nacional Alto al Fuego 2018-2019 realizada por COANIQUEM en colaboración con Carabineros de Chile y el Ministerio de Salud, se dieron a conocer los resultados obtenidos en el Catastro Nacional de Vigilancia Epidemiológica – cuyo objetivo es dar a conocer el registro de niños quemados- notificados por los centros de salud públicos y privados a nivel nacional.
El catastro, que comprende entre el 6 de diciembre de 2018 y el 6 de enero de 2019, reveló un aumento del 33% en los casos de niños quemados por fuegos artificiales, siendo los principales afectados menores entre 4 y 14 años.
“Lo que más nos preocupa es que el 75% de los niños afectados era observador, y no manipulador de fuegos artificiales. Esto nos comprueba el riesgo que significa el uso de estos peligrosos elementos por particulares, que no cuentan con la autorización ni supervisión necesaria, poniendo en riesgo su vida y la de terceros”, aseguró el Dr. Rolando Saavedra, Director de Gestión Médica de COANIQUEM, reforzando el llamado a no comprar, no vender, ni manipular fuegos artificiales.
Durante el periodo 2018-2019, se registraron ocho casos, de los cuales un 50% se notificó en la Región Metropolitana, mientras que los casos restantes se distribuyen equitativamente entre la Región de Antofagasta (12,5%), Valparaíso (12,5%), Araucanía (12,5%) y Tarapacá (12,5%).
Según el Coronel Fernando Bywaters, Prefecto (S) Prefectura Control de Armas y Explosivos OS.11, “se registraron 97 detenidos por venta, uso y compra de fuegos de artificio y se decomisaron cerca de 143.000 elementos pirotécnicos, siendo la región de Antofagasta donde hubo más notificaciones”. (Período 6 diciembre 2018- 6 enero 2019).
Balance Campaña Alto Al Fuego 2018-2019
● Ocho casos notificados.
● Edad entre 4 y 14 años. Cinco de ellos fueron hombres y tres mujeres.
● Los casos registrados ocurrieron entre los días 30 de diciembre y 1 de enero.
● Dos de ellos manipulaban los fuegos artificiales (hospitalizados), y seis eran observadores.
● Seis quemaduras de profundidad intermedia (AB); una superficial (A) y una profunda (B).
● Dos de ellos fueron por petardo, dos por volador, uno por bengala, uno por estrellita. uno por fuego artificial artesanal y uno por fuego artificial no identificado.
● Las zonas afectadas fueron mano y extremidades inferiores.