En la zona de Pichidangui, Los Molles y Pichicuy no viven más de 2 mil 500 personas. Sin embargo, esa cifra -en verano- se multiplica varias veces, llegando a las 15 mil personas. Son sus atractivos naturales los que atraen a tantos visitantes, entre los que podemos encontrar una generosa costa que provee de playas y exquisita gastronomía, además de una particular flora y fauna nativa.
A sólo 186 kilómetros de Santiago, a unas dos horas en auto, es posible acceder a esta zona ubicada en el límite de la Cuarta y Quinta región, que vive un verdadero auge. Su temperatura -en verano- no sobrepasa los 28 grados. En los meses de invierno, el efecto del mar logra que la temperatura sea cerca de 2 a 3 grados más elevada que en Santiago. Se puede disfrutar del sol más de 300 días al año; un verdadero privilegio.
Atractivos naturales
La flora es otro de los grandes tesoros de esta zona, que alberga varias especies endémicas y en conservación. Según cifras del Ministerio de Medio Ambiente, al menos el 65% de las cactáceas del país está bajo algún grado de amenaza, haciendo difícil verlas hoy en día, pero aquí podemos encontrarlas.
El Bioparque Puquén posee una gran importancia biológica. Es considerado uno de los cinco ecosistemas mediterráneos del mundo que preserva una gran variedad de especies de flora silvestres. Está ubicado en un ambiente de bellos paisajes de acantilados y formaciones geológicas que con la llegada de la primavera alcanza su máxima belleza junto a la floración de plantas y flores típicas.
En el mismo sector se encuentran unos roqueríos que están a 30 metros sobre nivel del mar. El gran atractivo es el chorro de agua proveniente de las olas que rompen y suben con gran presión hasta llegar a la grieta generando un tremendo estruendo.
Cerca se encuentra también el cerro Santa Inés que posee un bosque relicto de olivillos, de una belleza extraordinaria.
Pensando en estos atributos, hay muchas personas que han decidido edificar su segunda vivienda en la zona. “La cercanía con Santiago permite arrancarse los fines de semana para llegar a esta zona privilegiada. Aquí no sólo hay una naturaleza que asombra, sino que también muchos panoramas; restaurantes típicos, buceo todo el año e incluso surf en la playa de Pichicuy que tiene de las mejores olas del país. Por eso es que pensamos en desarrollar un proyecto inmobiliario, que respete su entorno, con terrenos para familias que quieran vivir acá o tener una segunda casa”, dijo el gerente general de la inmobiliaria a cargo del la venta del terrenos en el condominio Rocas del Mar, Raimundo Droppelmann.
En este lugar, los nuevos vecinos de Los Molles, tienen el privilegio de convivir con especies exclusivas como la orquídea de los molles, el lirio de los molles y el chagual. Así como con el lúcumo silvestre, que se encuentra en peligro crítico de extensión; un árbol de ramaje tupido y denso, con hojas color verde oscuro, y frutos de color rojo intenso, que puede alcanzar los 5 metros de altura.
Sin duda se trata de una zona que sorprende por sus características que la hacen única; con paisajes que parecen verdaderas postales; ideal para pasar unas buenas vacaciones, una escapada de fin de semana y por qué no, dejar la gran ciudad para dar paso a una mejor vida.