Por Suzanne Wylie – Fundación Reforestemos
En Fundación Reforestemos, al ver los números que nos entrega Conaf respecto a los incendios del año pasado, en los cuales vemos que han reducido en un 95% respecto a la temporada anterior, en nos alegra profundamente el avance que hemos hecho como país. La mayor inversión por parte del Estado, la educación civil en cuanto a prevención, la incorporación de nuevas tecnologías para la detección temprana de incendios, el aumento en recursos aéreos y también en el número de brigadistas para combatir los incendios forestales, son parte de los factores que claramente incidieron en que como país hayamos podido actuar a tiempo y evitar una catástrofe tan grande como la que vivimos el año pasado.
Sin embargo, no debemos olvidar que la catastrofe ocurrida el verano 2017, quedo en la historia, instalándonos en el séptimo lugar del ránking internacional de incendios forestales de mayor dimensión a nivel mundial, por lo que el compararnos con la temporada pasada no puede ser nuestro parámetro. Aún seguimos siendo un país propenso a este tipo de desastres, por lo que el cuidado y prevención que debemos tener debe ser siempre constante y nunca bajar la guardia.
Por esto, es fundamental que entre nosotros mismos, los ciudadanos, creemos conciencia de que la prevención es tarea de todos, con prácticas tan simples y cotidianas como preocuparnos dónde tiramos los cigarrillos y fósforos, cuidándonos de no dejarlos en el suelo, o no realizar fogatas en lugares autorizados ni dejar basura ni vidrios en pastizales o bosques. Así, nosotros mismos podemos evitar una catástrofe como la que vivimos el año pasado. Los árboles y bosques nativos tienen un valor ecológico altísimo para el medio ambiente, poseen el rol de ser un “pulmón” para el planeta e incluso evitar la erosión de los suelos y el arrastre de sedimentos hacia ríos, esteros, cuencas, laderas y quebradas, entre otras funciones, por lo que no olvidemos que es nuestro deber preservarlos, para las presentes y futuras generaciones.
Recordemos que el 99% de los incendios forestales son provocados por acción del hombre, por lo que está en nosotros el proteger nuestros bosques, incluyendo nuestra flora y fauna nativa, y evitar que sea arrasada una vez más por los devastadores incendios forestales.
