Sanitarias certifican su modelo que busca que sus colaboradores prevengan, detecten y den las respuestas correctas.
Tras un intenso trabajo interno, que tomó cerca de dos años, Esval certificó su Modelo de Prevención del Delito (MPD), que eleva los estándares de su gobierno corporativo y refuerza la transparencia y ética con que deben actuar todos sus colaboradores.
El modelo considera la designación de un encargado de prevención de delitos, que tendrá a su cargo acciones de difusión para informar a los equipos de trabajo, sobre aspectos de prevención, detección y respuesta. Además de proceso de control interno para prevenir el cohecho, lavado de activos, financiamiento del terrorismo y receptación.
“En el marco de la mejora continua y nuestro modelo de Gobierno Corporativo, hoy contamos con una nueva herramienta que nos permite seguir avanzando en transparencia y un mejor desempeño. Es un esfuerzo importante que busca dar garantías a nivel interno y externo respecto de nuestras actividades y riesgo de delitos que pudiesen materializarse con relación a esta ley”, dijo el gerente general de la empresa José Luis Murillo.
Junto con ello, la empresa ha implementado canales de denuncias para abordar de forma oportuna cualquier desviación a las normas. De esta forma, se garantiza que el desempeño de todos los integrantes de la empresa dé cumplimiento a lo que exige la ley y la ética.