Instituciones económicas y financieras anunciaron este martes en una cumbre en París sus compromisos para luchar contra el calentamiento global, que van desde el abandono de las energías fósiles hasta la presión a las empresas más contaminantes para que se sumen a la lucha.
Petróleo y gas
El Banco Mundial (BM) anunció que dejará de financiar la exploración y extracción de petróleo y gas después de 2019. Se trata del primer banco multilateral que toma una decisión así en el sector.
Además, a partir del año próximo, la institución informará anualmente sobre las emisiones de gases de efecto invernadero de los proyectos de inversión que financia en sectores clave, como el energético. Generalizará además la adopción de un precio interno del carbono en sus inversiones futuras.
Carbón
La compañía de seguros AXA acelerará su desvinculación de la industria del carbón. El grupo anunció que no asegurará o invertirá en cualquier empresa implicada en la construcción de nuevas centrales de carbón. Señaló además que retirará 2.500 millones de euros de inversiones del sector. Paralelamente, aumentará en 9.000 millones de euros sus inversiones “verdes” de aquí a 2020.
El banco holandés ING se comprometió a “acelerar la disminución” de sus financiamientos destinados a las centrales de carbón. De aquí a 2025, financiará exclusivamente a los productores de electricidad que utilicen menos de 5% de carbón y dejará de financiar directamente los proyectos de centrales de carbón. Estos financiamientos directos ya bajaron un 9% el año pasado.
En cambio, este grupo estima que es “más complicado” dejar de financiar la industria petrolera y gasífera. Según las previsiones de la Agencia Internacional de Energía (AIE) los combustibles fósiles seguirán proporcionando la mitad de la energía consumida en 2040.
Riesgo climático
Más de 200 empresas decidieron adoptar las recomendaciones de un grupo de trabajo del G20 para ser más conscientes del riesgo climático en sus actividades. Entre estas figuran 20 de los bancos más importantes del mundo y gestores de activos, como HSBC o la aseguradora AXA.
Se comprometen a publicar “su estrategia para gestionar los riesgos (climáticos), pero también a aprovechar las oportunidades” que ofrece la lucha contra el cambio climático.
Empresas bajo vigilancia
Un grupo de más de 200 grandes inversores, incluyendo HSBC o el fondo de pensión público más grande de Estados Unidos (CalPERS), decidieron presionar a un centenar de las empresas más contaminantes del mundo para que se sumen a la lucha contra el cambio climático, reduciendo sus emisiones y publicando sus datos financieros relativos al clima.
En la lista de las cien empresas implicadas en esta iniciativa, bautizada “ClimateAction 100+”, figuran grandes grupos petroleros y gasíferos (BP, Chevron, Coal India…), actores del sector de transportes (Airbus, Ford, Volkswagen…), y grupos mineros y siderúrgicos (ArcelorMittal, BHP Billiton, Glencore…).
Concretamente, durante cinco años, estos 225 inversores seguirán de cerca a estas empresas. Si hacen progresos suficientes podrán ser retiradas de la lista.
Fijar precios al carbono
Líderes de países de las Américas acordaron fijar un precio a las emisiones de gases de efecto invernadero para luchar contra el calentamiento global.
La iniciativa fue lanzada por los líderes de Canadá, Colombia, Chile, México, los gobernadores de California y Washington, y los primeros ministros de las provincias canadienes de Alberta, Columbia Británica, Nueva Escocia, Ontario y Québec, en el Marco de Cooperación de las Américas.
Presupuestos “verdes”
El presidente de la OCDE, Ángel Gurría, anunció el lanzamiento de una iniciativa bautizada “Paris Collaborative on Green Budgeting”, al que van a unirse Francia y México, y que contribuirá a la elaboración de metodologías para esteblecer “presupuestos nacionales ‘verdes'”.
© Agence France-Presse