Como parte de su compromiso por ayudar a familias que aún viven en campamentos y que trabajan diariamente por una solución habitacional definitiva, TECHO-Chile anunció el inicio de una inédita campaña junto a Sodimac para apoyar la construcción de viviendas transitorias y proyectos comunitarios en distintas ciudades del país.
La campaña consiste en el lanzamiento de un producto solidario, a través del cual los clientes de Sodimac podrán contribuir directamente a los Trabajos de Verano 2018 de TECHO-Chile, que buscan mejorar la calidad de vida de cerca de 1.800 familias de la Región Metropolitana, Antofagasta, Valparaíso, Los Ríos y Los Lagos. Se beneficiará a 27 comunidades con el apoyo de 1.200 jóvenes voluntarios.
Las compras del producto solidario en las tiendas de Sodimac -un kit de herramientas marca Redline- aportarán al financiamiento de viviendas progresivas y 27 proyectos de infraestructura como sedes, huellas peatonales, viviendas de emergencia y torres de agua destinadas a cubrir necesidades básicas y urgentes en campamentos y villas de blocks.
Esta iniciativa dada a conocer hoy -que se inserta en una alianza de una década entre TECHO y Sodimac para trabajar mancomunadamente no solo en Chile, sino también en Argentina, Brasil, Perú y Uruguay- se agrega a otras campañas conjuntas para sensibilizar y reunir fondos para TECHO. Este esfuerzo cuenta con la participación de miles de voluntarios de Sodimac y de proveedores.
“Llevamos 10 años trabajando juntos porque creemos en los sueños de los hogares de nuestro país. Para nosotros es un aporte tremendo que Sodimac esté comprometido con nuestra causa y con miles de familias excluidas en nuestra sociedad”, comentó el Capellán de TECHO-Chile, Juan Cristóbal Beytía.
Por su parte, el gerente de sostenibilidad de Sodimac, Juan Carlos Corvalán, resaltó también la larga historia de trabajo conjunto de TECHO y Sodimac. “Esperamos que esta nueva iniciativa sea realmente una ayuda para las familias que todavía viven en campamentos y que requieren del apoyo de todos”, subrayó.
Actualmente, 40.541 familias aún viven en el país en campamentos, los que han aumentado en 48% entre 2011 y 2017.