Los residuos llegarán para su disposición final a la empresa cementera Melón en La Calera para convertirse en energía.
Se consolidó un hito ambiental clave para la Isla de Pascua, ya que llegaron al continente más de 200 neumáticos que estaban depositados en vertederos de esa localidad. Se trata de una iniciativa que se comenzó a gestar a principios de 2017 y que hoy se materializó, gracias a la cooperación entre la municipalidad de Isla de Pascua, Melón Cementos, otras empresas privadas de la zona y asociaciones gremiales relacionadas al rubro.
Esta iniciativa, que se encontraba en estudio hace 4 años, si bien busca disminuir los riesgos sanitarios con la propagación de enfermedades, también tendrá impactos en la extensión de la vida útil de los vertederos de la isla y en el medioambiente.
La directora de medio ambiente de la municipalidad de Isla de Pascua, Ana María Gutiérrez, destacó que la importancia de este envío “es que se disminuye el riesgo sanitario para la proliferación del vector (mosquito que transmite enfermedades) y se constituye como uno de los envíos más emblemáticos de residuos peligrosos que se ha hecho desde la Isla de Pascua, considerando el riesgo sanitario que tienen los neumáticos dispuestos de mala manera”.
Gracias a la alianza con Melón Cementos, estos neumáticos llegarán a su disposición final en la planta de La Calera. Esta empresa realiza hace más de 10 años el coprocesamiento de estos residuos, como insumo para convertirlos en energía. El gerente de planta La Calera de Melón Cementos, Marcelo Rey, indicó que “con esta iniciativa estamos dando una solución ambientalmente sustentable en la disposición final de los neumáticos en desuso”.
Una vez que desembarcaron los neumáticos en el puerto de Valparaíso, la Cámara de la Industria del Neumático de Chile los trasladó a la planta de cementos Melón en La Calera para ser coprocesados en un tiempo de 2 a 4 horas.
