El último informe del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) revela que el desempleo juvenil entre los 15 y 24 años llega al 17,2%, lo que duplica el promedio nacional. O sea, de cada 100 jóvenes, 17 no cuentan con un empleo formal o informal. Estas cifras golpean justamente al segmento socioeconómico y etario al que, como país, debemos proporcionarle mayor cantidad y calidad de oportunidades. En ese escenario, es legítimo preguntarse qué acciones estamos haciendo y cómo, para no seguir profundizando en la misión que tenemos como sociedad con los jóvenes, quienes están en el momento preciso de hacer un cambio en sus vidas si les abrimos la puerta hacia la movilidad social.
Como empresa continuaremos impulsando las iniciativas que nos han convertido en el principal empleador juvenil del país. Y es que estamos preocupados de mucho más que los números. Más del 90% de nuestros trabajadores tiene menos de 35 años y siete de cada 10 empleados complementa su empleo con estudios formales. ¿Por qué ocurre eso?, pues contamos con programas específicos para quienes aún están estudiando, otorgándoles la posibilidad de equilibrar el trabajo con su vida académica y familiar. Sin importar si este trabajo es el primero, es temporal, es una práctica o aspira a desarrollar una carrera profesional, como empresa nos encargamos de potenciar las habilidades y competencias de cada uno de los jóvenes que trabajan con nosotros, entregándoles, por ejemplo, la oportunidad de recibir becas académicas para financiar sus estudios.
Somos el primer empleador de muchos, y es aquí donde nos sentimos orgullosos, pues independiente del tiempo que estén con nosotros logramos que muchos jóvenes adquieran normas y metodologías de trabajo, sumen experiencia y tengan la oportunidad de crecer profesionalmente dentro o fuera de la compañía. De hecho, hoy muchos de nuestros actuales líderes comenzaron trabajando en nuestras cocinas. Gracias a esto, hoy formamos parte de la Alianza NEO, iniciativa liderada por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para mejorar las condiciones de acceso al mercado laboral de los jóvenes en Latinoamérica.
Sin embargo, a pesar de los esfuerzos de todos los sectores, aún hay miles de jóvenes esperando que esa puerta se abra para poder dar un primer paso que será determinante en sus vidas. Y aquí estamos nosotros, dispuestos a ser ese agente de cambio.
