El modelo de intervención potencia sus negocios y les ofrece un nuevo canal de comercialización, vinculándolos con empresas privadas.
En nuestro país, son muchos los hombres y mujeres que intentan armar sus propios negocios, para sacar adelante a su familia y optar por una mejor calidad de vida. Muchos de ellos son emprendedores que se encuentran en una situación de vulnerabilidad, que no cuentan con el capital, el conocimiento, ni las herramientas necesarias para montar una pyme que sea rentable y sostenible en el tiempo. Por lo mismo, muchos de estos negocios o proyectos desaparecen al poco tiempo.
Para revertir este historial es que en Chile opera hace más de 5 años Emprediem (www.emprediem.com) , una empresa B certificada que nace para cubrir una necesidad súper puntual: la falta de acceso a herramientas de emprendimiento e innovación. Así, y a través de diferentes programas, buscan democratizar estas herramientas, llevándolas a personas y lugares con falta de oportunidades.
Bajo esa misma premisa surge el programa Glocart (www.glocart.cl), una comercializadora de regalos corporativos que busca llevar la artesanía local al plano global, con foco en el triple impacto (social, económico y medioambiental) y en el comercio justo. Todo lo que comercializa es creado por emprendedores de distintas localidades de Chile, que crean a mano productos como: mermeladas gourmet, harina de piñón, jabones y lociones energizantes, mochilas, carteras, figuras decorativas, tablas de madera y mucho más, todo ello con una premisa súper clara: detrás de cada producto, hay un emprendedor con una historia.
Estos emprendedores pasan por diversos modelos de intervención, que potencian sus negocios, mejoran su propuesta de valor y diseño, y les ofrecen un nuevo canal de comercialización, vinculándolos con empresas privadas. Un muy buen ejemplo es el caso de Alejandra Ponce, fundadora de Tatitu, quien comercializa pequeñas figuras decorativas que rescatan la cultura de los pueblos originarios chilenos. Alejandra pasó por un modelo de intervención llamado Mujeres ON, y hoy forma parte del catálogo actual de Glocart.
“Además de las herramientas de comercialización y de uso de redes sociales, lo que más valoro del programa es la red humana que se forma. Una red de apoyo, una comunidad con la que puedo contar cada vez que lo necesite. El programa además me enseñó a respetar mi precio y saber negociar. Antes, con tal de vender, no sabía llegar a acuerdos con el cliente. Ahora, ya no siento que me estén haciendo un favor al comprar mi producto. Mi producto vale, y mi trabajo vale, y por eso es tan importante fijar un precio justo” dice Alejandra Ponce.
Desde Emprediem hacen un llamado a las empresas a apoyar este tipo de programas, y sobre todo, a elegir productos con sentido al momento de comprar regalos corporativos: de esta forma , además de entregar a sus clientes, empleados o colaboradores productos novedosos y de gran calidad, estarán ayudando a miles de emprendedores a consolidar sus pymes y dar sustento a sus familias. Y lo más importante; estarán transmitiendo una cultura y una identidad de marca positiva y constructiva socialmente.
Todos los interesados pueden encontrar el catálogo 2017 en https://bit.ly/catalogoglocart y los emprendedores con habilidades en la artesanía que quieran sumarse y ser parte de Glocart se pueden contactar directamente al correo contacto@glocart.cl.
