Como parte de su apoyo a los emprendedores desde sus etapas más tempranas de desarrollo, Bci firmó una alianza con Start-Up Chile, la mayor aceleradora del país y de Latinoamérica. “Nuestro principal objetivo es vincularnos a largo plazo con los emprendedores que forman parte de este prestigioso programa, creando lazos de confianza a partir de un apoyo para la viabilidad y sostenibilidad de sus negocios”, detalla Mauricio Henríquez de Bci Nace.
De hecho esta “sociedad” entre ambas instituciones busca por una parte, crear sólidas redes nacionales e internacionales de mentores e inversionistas para los emprendedores, y a su vez, incorporar las mejores ideas en las distintas áreas de gestión de grandes empresas de distintas industrias, en este caso de Bci. “Contamos con una estrategia de Valor Compartido con un fuerte compromiso social de apoyo en todas las etapas del ciclo comercial de un emprendimiento, de forma ágil, cercana y especializada”, cuenta Henríquez.
Año a año Start-Up Chile recibe cerca de 250 startups que están buscando apoyo financiero de sus proyectos, redes de contacto que se traduzcan en entrenamiento y mentores, así como ser parte de la una de las aceleradoras más importantes del mundo.
Cambiar la mentalidad emprendedora de los chilenos es el gran objetivo de esta alianza entre Bci y Start-Up Chile, que a través de herramientas concretas de apoyo en financiamiento y capacitación buscan atraer a los grandes talentos que pueden ser una gran contribución al ecosistema del banco. A través de eventos como los “techevening” y los “demoday” en formato pitch, se conocerán las mejores ideas en torno a variados temas, desde economía colaborativa y smart cities, hasta minería y fintech, que pueden aportar a la experiencia de Bci, siendo un proveedor del banco o adquiriendo algún producto o servicio financiero que se acomode a su etapa y necesidades comerciales.
“Con esta alianza con Start-Up Chile ratificamos nuestro profundo compromiso con los emprendedores y con su desarrollo, como un pilar fundamental para la economía y desarrollo del país. Para emprender no basta sólo con una buena idea. El apoyo de toda una estructura social junto a una visión país en pos del desarrollo del emprendimiento, es clave para impulsar este motor económico, fundamental para la competitividad y el futuro de Chile”, concluye Henríquez.