“La oruga se desliza por el mundo consumiendo. Luego sufre un cambio. Aparece una mariposa que se eleva y poliniza el mundo”. Con esas palabras comenzó Raj Sisodia, economista fundador del término Capitalismo Consciente, su presentación en el Seminario de Sostenibilidad organizada por la Cámara Chilena de la Construcción (CCHC) y Empresas Conscientes.
Estamos inmersos en un mundo de consumismo. Al igual que la oruga “la empresa sólo gana dinero absorbiendo”, acusó Sisodia, sin retribución a nuestro entorno. El economista de origen indio, en la instalación de la CCHC, invitó a los oyentes a transformarse, a convertirse en mariposas que polinicen bienestar social, medioambiental y económico.
El economista vino por tercera vez a Chile a exponer sobre el Capitalismo Consciente, corriente que busca que este sistema económico persiga un fin más allá de la maximización monetaria, sino que también genere un impacto social y medioambiental positivo para la comunidad.
Sisodia defiende el comienzo del capitalismo. Recuerda que en sus inicios, este sistema económico tenía como fin “elevar a la gente y sacarla de la pobreza”. Sin embargo, hoy nos encontramos en un escenario distinto donde el capitalismo debe evolucionar.
Las empresas están orientadas a la maximización y competencia; un sistema egoísta e instrumental en relación al medioambiente y la mano de obra. “La dignidad de las personas debe estar al centro”, enfatiza el académico.
Para dar a entender este capitalismo consciente, Sisodia esboza todos los cambios culturales que están ocurriendo en el mundo. Primero señala el alto nivel de conectividad “estamos extremadamente informados”, argumenta. Las personas están a un click de la información, transparentando todo en un instante.
Por otro lado, la mujer de a poco ha ido ganando terreno luego de ser excluída socialmente. Raj sostiene “cada profesión estará dominada por mujeres”. Esto genera un nuevo sistema de valores, promoviendo que las cualidades femeninas se inserten en las competencias dominadas por hombres.
Para Sisodia, el hombre y la mujer forman “un ser humano completo”. Con un gráfico, presentó las cualidades masculinas como: analítico, confidente, enfocado, entre otros y las cualidades femeninas: paciente, leal, intuitiva y otras. Para el autor de “Firms of Endearmente”, estos conceptos unificados forman un nuevo sentido de liderazgo.
Desafíos del capitalismo
Frente a las nuevas necesidades sociales, Sisodia declara “todos los seres humanos tener un propósito y las empresas también”. Estamos bajo el paradigma de interdependencia donde se debe considerar las consecuencias de nuestras propias acciones. El economista exhorta a “pesar en los grupos de interés y no tanto en accionistas”.
El Capitalismo Consciente cuenta con cuatro pilares: Higher Porpuse (Propósito elevado), Integration Stakeholders (integración stakeholders), Concius Leadership (Liderazgo consciente) y Concius Culture (Cultura consciente).
El primero se basa principalmente en algo que valga la pena para los demás. El dinero tiene que servir como medio para el propósito que la empresa persigue y así servir al bienestar. En cuanto a la integración de los stakeholders, Sisodia cita a Gandhi “tenemos que ser el cambio que queremos en el mundo”. En cuanto a liderazgo y cultura consciente, se basan en la complejidad del mundo insertado y los valores que promueven para un bienestar.
Es necesario modificar los patrones económicos tradicionales. Raj Sisodia cuestiona que “no hay productividad en esta industria”. Las personas no tienen un propósito en su vida laboral. “Cerca del 87% de las personas no están comprometidas con su trabajo”, sostiene el economista y afirma que esto es “un desperdicio de vida”.
Falta consciencia. Falta comprender que todo lo que se cree y crea impacta al resto. “No se está en contra de las utilidades, sino de cómo se gana el dinero”, enfatiza Sisodia. Las rentabilidades no deben perseguirse, deben ser el resultado de un propósito de bien común.
Ante esto, la formación de los nuevos economistas en el mundo carecen de este sentido consciente. Las lecciones siguen enfocadas en los principios de la economía tradicional, sin considerar la interdependencia y el nuevo escenario de colaboración. “En las facultades hay mucha administración y poco liderazgo”, comenta el académico y agrega “estamos perpetuando un concepto miope”.
Las empresas han perdido el sentido del lugar donde nacen. Se ha consolidad el margen de las utilidades distorsionando sus objetivos. Ante este escenario, “la realidad es que estamos todos en el mismo barco, estamos todos interconectados”, puntualiza Raj. “El dinero no es el fin, eso se nos ha perdido de vista”, plantea el economista.