Por Rodrigo Constandil, Sub-Gerente de Sostenibilidad y Certificaciones. S.V. Miguel Torres S.A. – Chile
La Productividad versus la Sostenibilidad es un tema que ha generado gran controversia en el último tiempo, ya que compatibilizar el crecimiento económico con el desarrollo social y el cuidado al medioambiente parece ser una paradoja difícil de remediar.
Debemos comenzar diciendo que mientras la raza humana siga aumentando sobre la tierra, seguiremos demandando en forma creciente los bienes y servicios básicos para nuestra subsistencia, esto quiere decir que el concepto de estancar la productividad es imposible bajo las condiciones actuales de explosión demográfica a la que estamos sometidos.
Por otro lado, según los datos de la Red Global de la Huella Ecológica (Global Footprint Network), el 06 de agosto pasado hemos sobrepasado el presupuesto total de demanda ecológica sobre el planeta para todo el año, esto quiere decir que hasta diciembre estaremos “sobregirándonos”, necesitando casi dos planetas para lograr subsistir. Este cálculo está basado en la generación de CO2 y la capacidad que tiene el planeta para absorber esta molécula, además de la demanda que ejercemos como humanidad sobre los recursos naturales.
Entonces, desde mi punto de vista es claro que debemos seguir aumentando la productividad si queremos seguir abasteciendo al mundo. Debemos seguir creciendo ya que la población siempre aumentará. Sin embargo, este crecimiento no puede ser a cualquier costo, debe ser moderado y siempre evaluando los costos sociales y ambientales que se generan, mitigando los efectos negativos y maximizando los positivos. Debemos apostar definitivamente por la maximización de la eficiencia, utilizando la menor cantidad de recursos posibles, ya sea agua, energía y materias primas, para obtener los mayores resultados.
Un punto importante tiene que ver con nuestra postura como consumidores al entregar nuestra confianza, por medio de la compra, a empresas jugadas por la conservación del medioambiente, la eficiencia energética e hídrica, el menor uso de packaging o bien de envases más amigables con el medioambiente, que demuestren una consistente preocupación social por su entorno y por sus trabajadores y que consideren a sus proveedores como un eslabón esencial de su cadena productiva.
Muy importante también es que como humanidad trabajemos fuertemente en llegar a obtener una correcta distribución de los recursos, ya que mientras se pierden en algunos lugares, en otros son absolutamente necesarios. No solo estoy hablando de igualdad de ingresos que de por sí es un tema muy importante, sino que hablo de cómo eliminamos toneladas y toneladas de alimentos que han perdido sus características organolépticas mientras en otros lugares, a veces de la misma ciudad, la población muere de hambre.
La sostenibilidad es una mesa que tiene tres apoyos: Económico, Social y Ambiental. Cualquiera de estos tres que no se desarrolle íntegramente redundará en un desequilibrio que más temprano que tarde nos afectará a todos y a la forma de vida que hemos construido. Claramente estamos frente a un gran desafío del cual ninguno de nosotros puede restarse y necesariamente requiere la concurrencia de todas y todos, no importa que tan grande o pequeño sea mi aporte, a la hora de contabilizar esfuerzos, todos sumarán.
¿Productividad o Sostenibilidad?
