Por Patricia Aguilera Feliú, Ingeniera Agrónoma, Docente Escuela de Recursos Naturales Duoc UC.
La DGA afirma que un 68,5% de los chilenos vive bajo sequía
Para comprender la sequía tendríamos que ser pequeños agricultores de la zona norte o central de Chile o tendríamos que vivir todos los días con varias horas de agua cortada. No se concibe una nación desarrollada ni una vida moderna sin acceso libre de agua y agua de calidad, que sea capaz de hidratarnos y capaz de desarrollar los cultivos que alimentan al mundo.
El cambio climático tiene a 12 millones de chilenos viviendo bajo condiciones de sequía, lo que se ha ido produciendo conforme aumenta la temparatura promedio de los meses y disminuye el promedio de precipitaciones; teniendo como consecuencia una menor disponibilidad hídrica en ríos, lagunas, embalses, es decir, menos agua disponible para riego agrícola.
La zona centro-norte de Chile ha tenido una disminución de un 25% de lluvias, según la Dirección General de Aguas (DGA). Uno de los factores determinantes en este cambio climático es la elevada emisión de dióxido de carbono proveniente de todas las actividades relacionadas con combustión y con la agricultura tradicional.
Según la Dirección Meteorológica de Chile, para el año 2059 se espera un aumento de 1,5°C y un descenso de un 50% en las precipitaciones, en contraposición a la zona austral, donde se espera un aumento de un 20% en las precipitaciones en el mismo periodo.
En el norte chileno, donde se encuentra el desierto más árido del mundo, se espera un descenso en las precipitaciones de un 80% de aquí al 2030 y es la zona que produce la uva de exportación de mejor calidad, la uva para el pisco que tiene a Chile tan bien posicionado, la fruta primor que es capaz de tener los primeros volúmenes exportables del país y que consiguen el mejor precio en los mercados extranjeros y lo que aporta grandes ganancias al país.
La sequía entonces es una traba para un país que es una potencia agroalimentaria, que depende en gran medida de la actividad agrícola, teniendo siempre presente que la producción de alimentos depende de la disponibilidad hídrica. Es por ello, que tenemos que tomar medidas para cuidar el agua, que van desde no contaminar las napas de agua subterráneas con los desechos agrícolas y excesos de fertilización hasta postular a los fondos para la implementación de riego tecnificado de la Comisión Nacional de Riego (ley 18450). Esta ley fomenta la tecnificación de obras de riego, aumentando la eficiencia del uso del agua, mejorando la calidad de riego, lo que se traduce en mejores rendimientos y cosechas de mejor calidad.
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Si usted tiene producción agrícola, visite https://www.cnr.gob.cl/Ley18450/Paginas/%C2%BFC%C3%B3mo%20Postular.aspx
Sequía, la traba agroalimentaria
