Por Jorge Serón Ferré, Presidente CORMA Biobío.
Estamos culminando uno de los primeros procesos entre empresas forestales, alcaldías y vecinos, para desarrollar una labor en conjunto en temas de prevención y reducción de peligro en la propagación de incendios forestales, conservación del agua y coordinación del mantenimiento y uso de caminos públicos.
Hemos trabajamos fuertemente poniendo nuestras mejores capacidades y profesionales para abordar temas relevantes que son de mucha preocupación para la comunidad, acogiendo la invitación que nos extendiera la Intendencia de la Región del Biobío, y como sector hemos sido capaces de atender estos requerimiento y participar activamente en la búsqueda de soluciones.
Un claro ejemplo de lo anterior, es el primer convenio marco de cooperación público privada suscrito recientemente y que se ha empezado a trabajar entre CORMA y 22 comunas del secano costero e interior del Biobío, cifra que esperamos elevar a 30 alcaldías.
En la prevención de incendios, generamos un plan de trabajo en terreno en la interfase urbano – rural, a través de capacitaciones y material informativo que permitirá la autoprotección de los habitantes al disponer de mayor información para reconocer potenciales peligros.
También estamos desarrollando un programa específico en el tema del agua, con monitores para enseñar a la comunidad métodos para captar y reciclar el recurso, ya que el principal problema que tenemos es el abastecimiento permanente durante el año. Aquí es importante destacar que las empresas han permitido el libre acceso a los predios forestales donde hay fuentes de agua que pueden servir para resolver problemas de las comunidades. Y, en caso que por condiciones de geomorfología haya lugares en se pueden construir pequeños micro tranques, estos puedan ser cimentados, a fin de permitir que se desarrolle la agricultura familiar.
Del mismo modo, también hemos avanzado en la coordinación del mantenimiento y uso de caminos públicos, junto al Ministerio de Obras Públicas en un convenio con la Dirección regional de Vialidad, lo que nos va a permitir mejorar los estados de los caminos rurales, con el fin de poder priorizar acciones para conservación y mejora y hacer más amigable el tránsito de camiones.
Estas iniciativas nos han permitido tener un conocimiento más profundo de las condiciones en que se desenvuelve la comunidad que nos rodea y también a los vecinos les ha permitido apreciar que muchas de sus inquietudes y problemas son compartidos o similares a los que enfrentan el sector forestal en su conjunto, como es el caso de los incendios forestales y la necesidad de disponer de agua.
Son primeros pasos positivos que nos motivan a seguir avanzando en acuerdos que involucren a municipios, empresas y vecinos, para formar alianzas más estructuradas. Antes eran esfuerzos individuales, hoy mediante estos convenios de relación con la comunidad se está abriendo un camino de una estrategia global que plantea insospechadas oportunidades para trabajar mancomunadamente por el progreso de la región.
Un acercamiento concreto hacia la comunidad