El agotamiento y fracaso de los viejos paradigmas de conflicto y competencia en la empresas conduce al consecuente agotamiento de la Innovación y la Creatividad. Las empresas se replantean la necesidad de que las personas puedan expresarse integralmente dentro de las organizaciones. Gestión del Talento, Teambuilding, Risoterapia, Mindfullness. son algunas de las vías por las cuales se intenta que la Creatividad y la Innovación vuelvan a la empresa. Esta claro que hoy día, la empresa sostenible necesita crear un espacio de expansión para el artista interior de cada uno de sus miembros.
Dame la receta
Como en todos los grandes momentos disruptivos, no hay ninguna receta para sacar el artista interior: solo dejarlo salir. Como dijera Morpheus a Neo en Matrix “No pienses que lo eres, sabes que lo eres. No trates de liberar tu mente. Hazlo.”
En cada uno de nosotros habita la necesidad de crear. Lo hacíamos sin preguntar cómo cuando éramos niños, y aunque nos hayamos olvidado del placer de pintar, dibujar, cantar o bailar, el Artista Interior llama sin cesar a la puerta de la conciencia, esperando que un aroma, un gesto, un recuerdo, le permita salir a jugar. Ese estado de alineación con los que verdaderamente somos es el grado cero de la expansión creativa que podríamos activar en cualquier sitio. Relaciones, casa, trabajo, sexo, amigos, ocio, gobierno, negocios, cultura, sociedad.
Ser y escribir, cantar, pintar, fotografiar , conversar o contemplar algo porque su espíritu se lo reclama y de ese modo, recarga sus baterías con el verdadero prana y se conecta a los demás en un nivel diferente.La empres sostenible debe serlo también en cuanto a los sentimientos y creatividad de sus empleados. Es sencillo. Es simple, pero no es fácil. Lo antinatural es lo otro, lo que repetimos sin cuestionar.
El coro que nos aturde
Y allí aparece el soñar despierto, la palabra mágica, el poema escrito detrás de una fotocopia, la canción que nos acompaña incesantemente , el retrato que se nos aparece en la pantalla, la sonrisa de un recuerdo. Tal vez la obra de arte no asome de entre las nieblas cada día, pero cuando lo hace, el alma se llena de una emoción incomparable y uno sabe que las cosas no volverán a ser como antes. Sencillez, naturalidad y amabilidad, confianza en los demás, colaboración, bien común.